Los marcianos siempre han sido un tema debate en la cultura pop y hasta la fecha. Inspiración para infinidad de películas, series, mercancías etc. Así pues, Wells nos describe cómo sería una invasión alienígena.
Desarrollada en Londres, el narrador nos relata desde la llegada de estos seres extraterrestres hasta el fin de la misma invasión (un final sorpresivo).
Una historia bien narrada, pese a haber sido escrita en 1898, se estructura en breves capítulos con una prosa fluida, pese a ello, no pierde intensidad narrativa, sabe mantener el suspenso, la intriga y el horror de saber qué pasará con el protagonista y con la humanidad.
Más allá de ser una historia de ciencia ficción con tintes de horror, tenemos una sátira a los avances tecnológicos, a las élites que controlan estás tecnologías y unas reflexiones filosóficas sobre la naturaleza humana que recuerdan al absurdo de Albert Camus. Por ello y por cultura general, es una obra que todo mundo debería leer por lo menos una vez en la vida.
Cierro con su siguiente aforismo:
"Aunque haya una demora, el final siempre será el mismo. Hombres contra hormigas"
Irving Romero