Se trata de un interesante ensayo filosófico que, en principio, nos recuerda que la inactividad es esencial para recuperar nuestro lado humano.
Chul Han hace una fuerte crítica al sistema capitalista, mismo que nos vuelve prisioneros y nos roba nuestro tiempo libre. Para Chul Han, la vida hiperactiva nos convierte en nuestros propios sobreexplotadores, perdiendo la esencia y el sentido de la vida.
Y es cierto, estamos sometidos a una vida 100% en términos de rendimiento, por lo que Chul Han nos invita a reflexionar sobre nuestro acelerado ritmo de vida, pues “vivir” a ojos del capital, significa sobrevivir, llevándonos al burnout de la psique.
En apariencia parece que Chul Han no termina por aterrizar las ideas, pues solo cita continuamente otros filósofos o intelectuales del pasado, en este caso, su base para la vida contemplativa son: Arendt, Heidegger, Benjamin y Nietzsche. Sin dejar de lado a otros intelectuales como Marx, Proust o incluso los griegos.
Chul Han nos invita a recuperar nuestra vida mediante el no-hacer, la contemplación y la meditación. Tenemos pues, un interesante trabajo de reflexión filosófica, que si bien es de lectura compleja, es recomendable acercarnos a Han para poder analizar y reflexionar sobre los tiempos actuales y futuros que, a consecuencia de ello, nuestro frenético e imparable ritmo de vida nos termina llevando a nuestra inevitable destrucción y por ende, de la naturaleza.
Irving Romero