22 de marzo de 2024
alcalorpolitico.com
Esta será una de las primaveras más agitadas que viviremos en todo el país, será una estación marcada por la belicosidad de los grupos políticos que no lanzaran precisamente frescas y perfumadas flores sobre sus adversarios.
Lo que lanzarán serán verdaderas andanadas verbales repletas de agresivos vituperios, descalificaciones personales, calumnias insidiosas, llenas de colorido, pero letales, intentando paralizar o descontrolar el ritmo de avance y de penetración de los contrarios.
Todo matizado con esa rica esencia para hacer parecer malo al bueno embarrándolo de estiércol y bueno al malo resaltando sus virtudes.
Por eso lo hemos dicho hasta la saciedad, Morena no tiene por qué perder las elecciones presidenciales, lo tiene todo, comenzando por un electorado cautivo que, muy agradecido por los programas sociales, concurrirá a manifestarse a favor en las urnas electorales, siguiendo por la más de una veintena de gobernadores y más de mil presidentes municipales, síndicos y regidores que trabajan en todo momento para su partido en sus respectivos territorios muy cercanos al grueso del electorado, apoyados soterradamente por los funcionarios públicos con recursos materiales y monetarios sin límite.
Además, con ellos centenas de políticos de otros partidos que hasta hace poco militaban en los partidos de oposición, algunos con gran lustre y otros de medio pelo que, llevados por sus intereses personales y por la ambición de poder sin ningún recato ni escrúpulo, ahora son flamantes embajadores, funcionarios, o candidatos de Morena o de los partidos aliados a este movimiento.
Sin embargo, por largo tiempo hubo un periodo de desprecio e indiferencia hacia la opinión pública a la que no se atendió, ésta manejada por los medios masivos de comunicación, dolidos por los ataques y burlas sardónicas e hirientes emanadas desde la presidencia de la república en tono de defensa y de venganza se afanaban en contra atacar al mismo Presidente y a su candidata la Ingeniera Claudia Sheinbaum, destacando las fallas y los errores presentes y pasados del actuar presidencial y de su posible sucesora, labrándoles una imagen sumamente negativa.
De manera irreverente se ensañaron con la familia presidencial, no hubo ningún respeto a la vida privada de los hijos, de los hermanos, de los parientes, se les acusó de graves delitos como de corrupción, tráfico de influencia, enriquecimiento ilícito, de huachicoleros, de hacer grandes y escandalosos negocios, en fin, de llevar una vida poco ejemplar respecto de la política de austeridad que vastamente se exige a la población que la practique como forma de vida.
Así transcurrieron los tiempos de escándalo y de desgaste permanente, pero ahora se intuye una nueva actitud de los medios masivos de comunicación, que cansados de fingirse auténticamente democráticos y justicieros a cambio de ser celebrados como adalides de la libertad, parecen haber renunciado a ser sinceros luchadores por los ideales de la oposición que trabajan por construir un cambio que reivindique lo mejor de un pasado reciente, anhelado por quienes aspiran a vivir en armonía y con la seguridad de que se goza de derechos inviolables y con la seguridad que se vive bajo la protección de un estado justo y democrático.
Acoto, los comunicadores gozan de una esfera de libertad para expresarse acorde con los lineamientos que les marcan la empresa y la misma ley, carecen de autonomía por ejemplo para asuntos personales, ideológicos, partidistas y como norma principal la educación, corrección y respeto general a la sociedad, se desempeñan en base a un contrato de servicios, de ahí que es la empresa la que marca la línea política de cada uno de ellos.
Las reprensiones vienen en lo político electoral, cuando demuestran afecto por un candidato o por un partido y exageran la nota en los actos buenos y la sesgan en lo que pueda perjudicar al candidato con el que tienen simpatía, sobre todo si el candidato contrario ya tiene compromisos personales o económicos con la empresa.
Por los recientes acontecimientos se podría pensar que la candidata Claudia Sheinbaum, aunque tardíamente se dio cuenta del error de no concertar con los medios, es por ello que ahora ya debe de haber acuerdos empresariales de carácter económico, lo revelan varios hechos recientes de los que sólo mencionaré tres. El periódico Reforma que se publica en la ciudad de México, nos da una sorpresa insólita publicando una encuesta en la que eleva desproporcionadamente la ventaja de la candidata oficial y del presidente, esmerándose la redacción y sus reporteros para convencer al lector de que la encuesta es real, lo sorprendente es que este periódico no hay día en que no publique los supuestos malos resultados de la administración pública federal, habla mal del presidente de sus colaboradores y de su familia, destaca los hechos negativos en forma alarmante cuando se trata de violencia o de actos presumibles de corrupción, critica a la candidata por todo y ahora resulta que no, ahora se ha convencido de que estaba equivocado en sus puntos de vista y a lo mejor hasta pide perdón por esos desatinos.
Para corroborar su nueva línea el día de hoy se publica la despedida de Carlos Bravo Regidor, uno de los críticos del presidente, al que le ha señalado a su juicio varios errores, en la parte final de su carta de despedida se lee “La critica supone la posibilidad de buscar la verdad, aunque nunca la encontremos, la disciplina en cambio, supone acatar lo que sea, incluso mentiras sin cuestionar” “Despedida, Esta es por decisión de Reforma, mi última columna en estas páginas” es decir lo corrieron por incomodo a los buenos convenios de publicidad.
Otro caso no menos escandaloso y preocupante que será motivo de especulación es el cese de la periodista y colaboradora del Grupo Formula, Laura Brujes, quien sostuvo por la mañana un roce con el primer mandatario quien se dice la difamo, la reportera ese día simplemente fue llamada a la redacción para decirle que estaba despedida, vulnerando sus derechos laborales y sin ninguna causa fundada, vamos no tuvo siquiera la oportunidad de replicar.
Causas similares sucedieron en el Diario Milenio en donde la comunicadora televisiva Azucena Uresti, en fin, da la impresión de que los principales rotativos nacionales se alinean y alinean a su personal, desconocemos si en estos actos se está cuidando la línea de la verdad o simplemente se está imponiendo la mercadotecnia.
Finalmente, habrá que decir que como sea, si los partidos aparte de controlar su equipo de trabajo, con disciplina y esfuerzo, también deben de tener con ellos a la porra, la que grita, la que aplaude, la que reclama, la que vitorea, la que mienta madres, de lo contrario su triunfo siempre se cuestionará y sin ella la victoria es amarga, no será que con las encuestas triunfalistas y con los vítores del pueblo se esté preparando el verdadero golpe técnico del que habla el presidente, si fuera así quien los puede parar, así funcionaba la democracia de ayer, en que eran los medios los que cantaban el nombre del vencedor. Aunque es de señalarse que estos convenios no son con el Presidente a quien atacan y seguirán atacando puesto este está dispuesto a recibir todos los golpes para lograr el fin supremo de empollar a su sucesora.- no le hace.- Por el bien de la causa.
Lo que lanzarán serán verdaderas andanadas verbales repletas de agresivos vituperios, descalificaciones personales, calumnias insidiosas, llenas de colorido, pero letales, intentando paralizar o descontrolar el ritmo de avance y de penetración de los contrarios.
Todo matizado con esa rica esencia para hacer parecer malo al bueno embarrándolo de estiércol y bueno al malo resaltando sus virtudes.
Por eso lo hemos dicho hasta la saciedad, Morena no tiene por qué perder las elecciones presidenciales, lo tiene todo, comenzando por un electorado cautivo que, muy agradecido por los programas sociales, concurrirá a manifestarse a favor en las urnas electorales, siguiendo por la más de una veintena de gobernadores y más de mil presidentes municipales, síndicos y regidores que trabajan en todo momento para su partido en sus respectivos territorios muy cercanos al grueso del electorado, apoyados soterradamente por los funcionarios públicos con recursos materiales y monetarios sin límite.
Además, con ellos centenas de políticos de otros partidos que hasta hace poco militaban en los partidos de oposición, algunos con gran lustre y otros de medio pelo que, llevados por sus intereses personales y por la ambición de poder sin ningún recato ni escrúpulo, ahora son flamantes embajadores, funcionarios, o candidatos de Morena o de los partidos aliados a este movimiento.
Sin embargo, por largo tiempo hubo un periodo de desprecio e indiferencia hacia la opinión pública a la que no se atendió, ésta manejada por los medios masivos de comunicación, dolidos por los ataques y burlas sardónicas e hirientes emanadas desde la presidencia de la república en tono de defensa y de venganza se afanaban en contra atacar al mismo Presidente y a su candidata la Ingeniera Claudia Sheinbaum, destacando las fallas y los errores presentes y pasados del actuar presidencial y de su posible sucesora, labrándoles una imagen sumamente negativa.
De manera irreverente se ensañaron con la familia presidencial, no hubo ningún respeto a la vida privada de los hijos, de los hermanos, de los parientes, se les acusó de graves delitos como de corrupción, tráfico de influencia, enriquecimiento ilícito, de huachicoleros, de hacer grandes y escandalosos negocios, en fin, de llevar una vida poco ejemplar respecto de la política de austeridad que vastamente se exige a la población que la practique como forma de vida.
Así transcurrieron los tiempos de escándalo y de desgaste permanente, pero ahora se intuye una nueva actitud de los medios masivos de comunicación, que cansados de fingirse auténticamente democráticos y justicieros a cambio de ser celebrados como adalides de la libertad, parecen haber renunciado a ser sinceros luchadores por los ideales de la oposición que trabajan por construir un cambio que reivindique lo mejor de un pasado reciente, anhelado por quienes aspiran a vivir en armonía y con la seguridad de que se goza de derechos inviolables y con la seguridad que se vive bajo la protección de un estado justo y democrático.
Acoto, los comunicadores gozan de una esfera de libertad para expresarse acorde con los lineamientos que les marcan la empresa y la misma ley, carecen de autonomía por ejemplo para asuntos personales, ideológicos, partidistas y como norma principal la educación, corrección y respeto general a la sociedad, se desempeñan en base a un contrato de servicios, de ahí que es la empresa la que marca la línea política de cada uno de ellos.
Las reprensiones vienen en lo político electoral, cuando demuestran afecto por un candidato o por un partido y exageran la nota en los actos buenos y la sesgan en lo que pueda perjudicar al candidato con el que tienen simpatía, sobre todo si el candidato contrario ya tiene compromisos personales o económicos con la empresa.
Por los recientes acontecimientos se podría pensar que la candidata Claudia Sheinbaum, aunque tardíamente se dio cuenta del error de no concertar con los medios, es por ello que ahora ya debe de haber acuerdos empresariales de carácter económico, lo revelan varios hechos recientes de los que sólo mencionaré tres. El periódico Reforma que se publica en la ciudad de México, nos da una sorpresa insólita publicando una encuesta en la que eleva desproporcionadamente la ventaja de la candidata oficial y del presidente, esmerándose la redacción y sus reporteros para convencer al lector de que la encuesta es real, lo sorprendente es que este periódico no hay día en que no publique los supuestos malos resultados de la administración pública federal, habla mal del presidente de sus colaboradores y de su familia, destaca los hechos negativos en forma alarmante cuando se trata de violencia o de actos presumibles de corrupción, critica a la candidata por todo y ahora resulta que no, ahora se ha convencido de que estaba equivocado en sus puntos de vista y a lo mejor hasta pide perdón por esos desatinos.
Para corroborar su nueva línea el día de hoy se publica la despedida de Carlos Bravo Regidor, uno de los críticos del presidente, al que le ha señalado a su juicio varios errores, en la parte final de su carta de despedida se lee “La critica supone la posibilidad de buscar la verdad, aunque nunca la encontremos, la disciplina en cambio, supone acatar lo que sea, incluso mentiras sin cuestionar” “Despedida, Esta es por decisión de Reforma, mi última columna en estas páginas” es decir lo corrieron por incomodo a los buenos convenios de publicidad.
Otro caso no menos escandaloso y preocupante que será motivo de especulación es el cese de la periodista y colaboradora del Grupo Formula, Laura Brujes, quien sostuvo por la mañana un roce con el primer mandatario quien se dice la difamo, la reportera ese día simplemente fue llamada a la redacción para decirle que estaba despedida, vulnerando sus derechos laborales y sin ninguna causa fundada, vamos no tuvo siquiera la oportunidad de replicar.
Causas similares sucedieron en el Diario Milenio en donde la comunicadora televisiva Azucena Uresti, en fin, da la impresión de que los principales rotativos nacionales se alinean y alinean a su personal, desconocemos si en estos actos se está cuidando la línea de la verdad o simplemente se está imponiendo la mercadotecnia.
Finalmente, habrá que decir que como sea, si los partidos aparte de controlar su equipo de trabajo, con disciplina y esfuerzo, también deben de tener con ellos a la porra, la que grita, la que aplaude, la que reclama, la que vitorea, la que mienta madres, de lo contrario su triunfo siempre se cuestionará y sin ella la victoria es amarga, no será que con las encuestas triunfalistas y con los vítores del pueblo se esté preparando el verdadero golpe técnico del que habla el presidente, si fuera así quien los puede parar, así funcionaba la democracia de ayer, en que eran los medios los que cantaban el nombre del vencedor. Aunque es de señalarse que estos convenios no son con el Presidente a quien atacan y seguirán atacando puesto este está dispuesto a recibir todos los golpes para lograr el fin supremo de empollar a su sucesora.- no le hace.- Por el bien de la causa.