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Columnas y artículos de opinión
Contrapunto
La corrupción en el Congreso: ¿Quedará mal Bautista o caerá gente de Cazarín?
Víctor Murguía
13 de diciembre de 2024
alcalorpolitico.com
Como la vigilancia del uso de los recursos públicos recae en el Congreso del Estado, más allá de lo que haga el Órgano de Fiscalización Superior (Orfis), nunca se ha visto que algún diputado que dirija el Congreso sea acusado por corrupto.

Siempre salen limpios y nadie dice algo. Los reportes los colocan donde corresponden y están "impecables". Ahí si ejercen su independencia como poder, muy distinto a su papel en las iniciativas enviadas por el Poder Ejecutivo.

Lo mismo sucede con otros "poderes", como el de los militares, que también siempre salen limpios.


¿Quién se atreve a cuestionar, sobre el manejo del dinero, a los altos mandos del Ejército y la Marina? Sexenio tras sexenio no desvían ni un peso, pura gente honesta.

Así venía pasando en cada Legislatura de Veracruz, nunca nadie había tomado siquiera unos centavos o hecho negocios con los contratos, hasta ahora en que el nuevo coordinador de la Junta de Coordinación Política (Jucopo), Esteban Bautista, realiza severos cuestionamientos con relación al manejo de los recursos en la pasada Legislatura, la que coordinó Juan Javier Gómez Cazarín, ahora delegado de la Secretaría de Bienestar.

Tablets carísimas, pagos millonarios por limpieza y hasta papeles de baño que ni siendo de seda costarían lo que supuestamente se pagó por ellos en el pasado reciente, es lo que ha empezado a ser cuestionado y expuesto por el diputado Bautista y su gente.


Gómez Cazarín, con sarcasmo, responde que -no es textual, pero así se interpreta- no es lo mismo presidir una alcaldía pequeña, donde solo hay un alcalde, un síndico y un regidor (en alusión a Bautista, que fue alcalde de Soteapan) que estar a cargo de la Legislatura, donde despachan 50 diputados y cientos de empleados y que es visitado a diario por una gran cantidad de personas.

Ya se dará cuenta -dice el excoordinador de la Jucopo- de los gastos que implica el funcionamiento del Congreso.

Y sobre los contratos que, según el nuevo titular de la Jucopo, apuntan hacia la corrupción, Gómez Cazarín da un muletazo y, por un lado, recuerda que esos contratos no los firmó él sino el secretario general del Congreso, Domingo Bahena y, por otro, señala la incongruencia de que Bahena acaba de ser ratificado en el cargo que él le dio.


Tiene razón en parte el extitular de la Jucopo. No debió firmar ningún contrato que lo comprometiera, la cuestión está en que pretende hacer ver que no estuvo al tanto de la compra de tablets de 140 mil pesos, que eso se la pasaron de humo.

Es probable haya más contratos de ese tipo y que Gómez Cazarín argumente lo mismo y pues nadie le creerá ese desconocimiento.

Así las cosas, ahora, ante el ruido generado, ya no hay forma de que Bautista se eche para atrás. Forzosamente debe presentar denuncia y que, como ya lo dijo públicamente, la investigación debe avanzar hasta que "caiga quien caiga".


A ver qué pasa en este caso, pues puede suceder que en cualquier momento intervenga directamente la gobernadora Rocío Nahle y pare el asunto, pues si bien la lumbre legalmente no podría llegar a Gómez Cazarín, al menos sí lo chamuscaría por supuestamente no ver lo que ahora todo mundo ve, y Juan Javier brincó de diputado a delegado de Bienestar por intervención de Nahle.

En fin, Bautista al menos debe pescar un pez mediano o quedará mal no solo ante los ojos de sus demás compañeros legisladores sino ante la opinión pública veracruzana, y Gómez Cazarín tendría que meter las manos por su gente para no salir quemado, porque una cosa es decir que no sabía de contratos porque no los firmó y otra que le crean, empezando por su jefa, que tras ser coordinadora de la primera fracción parlamentaria de Morena y luego secretaria de Energía, no la pueden chamaquear.