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Columnas y artículos de opinión
Trinchera Final
Los tiempos del tiempo...
Jenaro del Ángel Amador
14 de julio de 2022
alcalorpolitico.com
1.- Lo que comienza termina. La presencia del presidente AMLO se inició y concluyó en su visita a la Casa Blanca de la avenida Pensylvania 6500 de Washington, apenas este jueves. Los resultados de su reunión con el presidente Joe Biden se apreciarán cuando los días pasen.

Ya los analistas han tejido conclusiones quizá a priori del viaje presidencial, pero lo importante queda: que la relaciones México-USA siguen vigentes y sólidas, más allá de especulaciones sensacionalistas.

2.- La vida sigue. Las especulaciones en torno al crecimiento de la lista de las “corcholatas” es pan de todos los días: Unos entran; otros salen, pero el tiempo y sólo el tiempo dictará las últimas palabras, más allá de quien físicamente deba pronunciarlas. Lo que hoy es firme, mañana ya no lo es. Y lo sabe el dueño del tablero.


3.- Por ejemplo: ¿Para qué y a quiénes serviría una nueva investigación sobre la muerte de Luis Donaldo Colosio Murrieta? Hay un recluso pagando sentencia y de ser cierto, ¿en qué bases se asentaría una nueva investigación?

Primero: ¿A quién beneficia? Segundo: Territorialidad de una presunta nueva investigación cuando han pasado los años y la escena y actores han cambiado o desparecieron de la vida. Tercero: ¿Quién o quiénes la promueven? porque no cualquiera puede pedir que se investigue como murió, por ejemplo, don Miguel Hidalgo y Costilla.

Son las risas y muecas de la ociosidad en tiempos en que todo se involucra con el quehacer político.


Y sobre todo cuando hay mejores cosas de que ocuparse.

4.- Por ejemplo: Los contratos de obras que diversas empresas realizan en Xalapa cuyos contenidos solo los conocen las partes. Tiempos, costos, materiales y etcétera.

Los ciudadanos que vemos y vivimos los contratiempos sólo sabemos que la calle Juárez o Hidalgo se corrige y compone y nada de tiempos y costos. Y no porque alguien no quiera información, sino porque ésta se encripta y únicamente la conoce el contratante pagador y sólo él puede reclamar demoras y malos materiales.


Estas informaciones a nadie dañan, salvo que las empresas exijan secrecía.