Uno de los retos que presenta el estado de Veracruz para quienes aspiran a ser gobernadores los próximos seis años, es el alto porcentaje de municipios sin tratamiento de aguas residuales, que en el caso de la entidad veracruzana es del 76.8 por ciento de acuerdo con el Censo Nacional de Gobiernos Municipales y Delegacionales 2017, del INEGI.
El resultado de este ejercicio indica que de los 212 municipios veracruzanos, sólo 45 cuentan con servicio de tratamiento de aguas residuales municipales; apenas el 21.2 por ciento del total.
El estudio realizado durante el año 2016 por el Instituto Nacional de Estadística y Geografía indica que 163 de los municipios Veracruz no cuentan con el servicio de tratamiento de aguas residuales municipales, o sea, el 76.8 por ciento; lo que implica que sus aguas sanitarias van a parar a ríos, lagunas o cañadas y esta situación es preocupante tomando en cuenta que nuestra entidad cuenta con 8.1 millones de habitantes.
Para este estudio realizado por el INEGI, no se contó con la información de los municipios de Atlahuilco, Mariano Escobedo, La Perla y Texhuacán, ya que sus representantes no la proporcionaron.
El Censo Nacional de Gobiernos Municipales y Delegacionales 2017, del INEGI, tiene como objetivo generar información estadística y geográfica de la gestión y desempeño de las instituciones que integran a la Administración Pública Municipal o Delegacional, específicamente en las funciones de Gobierno, seguridad pública, justicia municipal, agua potable y saneamiento, residuos sólidos urbanos y medio ambiente, con la finalidad de que dicha información se vincule con el quehacer gubernamental dentro del proceso de diseño, implementación, monitoreo y evaluación de las políticas públicas de alcance nacional.
Por lo anterior, estos datos sobre el estado de Veracruz son importantes para quienes aspiran a gobernar la entidad los próximos seis años.
Según el “Manual de Agua Potable, Alcantarillado y Saneamiento. Introducción al Tratamiento de Aguas Residuales Municipales”, de la Comisión Nacional del Agua (CONAGUA) del Gobierno federal, contar con servicios en el hogar —como el tratamiento de aguas residuales—, “es un factor determinante en la calidad de vida y desarrollo integral de las familias”.
En este manual de la CONAGUA se explica que “en un principio, el tratamiento se hacía mediante la descarga al suelo, pero rápidamente la superficie de los terrenos no fue suficiente para absorber cada vez mayor caudal de aguas residuales. En Inglaterra, después de la epidemia de cólera a mediados del siglo XIX, se inició la construcción de los sistemas de alcantarillado, pero el tratamiento de aguas residuales recibió poca atención”.