La ola de violencia registrada durante la última semana en la ciudad y en la región centro ha dejado al menos 10 personas asesinadas, la mayoría jóvenes menores de 25 años de edad.
Sobre estos hechos, las fiscalías regionales de la zona mantienen abiertas las carpetas de investigación correspondientes mientras que detectives de la Policía Ministerial trabajan en los casos para tratar de esclarecerlos y conocer el verdadero móvil de los crímenes.
De acuerdos a informes, el ajuste de cuentas entre bandas rivales es la principal línea de investigación que se lleva por el momento, aunque también se han registrado presuntos criminales abatidos por las autoridades.
Apenas el pasado sábado 30 de julio cuatro sujetos que viajaban en una camioneta Mazda con placas del Estado de México fueron abatidos a la altura de la colonia la Carbonera, en Nogales.
De los presuntos criminales, tres fueron identificados como F.M.M., de 25 años de edad; V.J.S.H., de 17 años, vecino de Río Blanco; y J.A.G.R., de 27 años y vecino de Paso del Macho.
En otro evento, el domingo 31 en la comunidad Magueyes fue localizado un hombre y una mujer, ambos degollados y con huellas de haber sido torturados, siendo identificado dos días después; ella era de Fortín y el individuo de Ciudad Mendoza.
Durante la mañana de ese mismo domingo fue encontrado entre cañales de la comunidad Palmillas, en Yanga, ejecutado y con huellas de tortura, el comerciante J.L.R.G., de 24 años de edad, vecino de Mata Naranjo, Cuitláhuac.
A esto se suma la muerte de un policía del IPAX que murió durante un asalto a la Caja Popular Zongolica, en donde también murió un presunto delincuente luego de ser linchado por los pobladores.
En Cuitláhuac, el pasado jueves, aunque supuestamente no hubo muertos durante el enfrentamiento con elementos de la SSP, para el Alcalde de Cuitláhuac, es la primera vez que se da un evento de este nivel, por la balacera que se suscitó en pleno centro de esta ciudad.