Critican falta de obras en localidad Estero del Ídolo, en Álamo

A pesar de que en la localidad se ubica el centro de acopio de cítricos más grande del país, con la compra-venta de hasta un millón de toneladas al año, las calles de Estero del Ídolo y el área de comercialización se encuentran en pésimo estado, señalaron los residentes.

La plaza comercial, conocida como “La Báscula”, se localiza en un sector aledaño a la carretera federal Álamo-Tihuatlán, donde se concentran más de una docena de básculas, cepilladoras y enceradoras de la fruta.

Compradores de cítricos como el señor Ramiro García señalan que, en la temporada alta de corte, es decir, entre enero, febrero y marzo, en La Báscula se concentran hasta dos mil cortadores listos para salir a las huertas, así como alrededor de 200 camiones, además de unas 400 camionetas que llegan para vender distintas variedades, lo que da una idea de la economía que allí se mueve, no solamente para Álamo, sino también para otros municipios de la región.

Sin embargo, la localidad no refleja beneficios, ya que la mayoría de las calles están en mal estado, con grandes encharcamientos, al igual que el área principal de comercialización de la fruta, donde se forman enormes lagunas cada vez que llueve, añadió también el señor Gustavo Ramírez, quien también está dedicado a la compra.

El corredor de fruta, conocido como “coyote” porque actúa como intermediario, explicó que la zona donde se concentra la mayoría de camionetas y camiones incluye una extensa área frente a las “bandas traspaleadoras” y cepilladoras, pero la explanada es particular.

“Toda esta parte es de los González, o sea que es particular. Hemos sabido que en la asamblea ejidal se ha comentado la necesidad de que arreglen todo esto, pero como es de un particular, así se ha quedado”, dijo.

Asimismo, residentes de la localidad añadieron que el gobierno municipal, a cargo de la alcaldesa morenista Lilia Arrieta, los tiene en el abandono. “Tenemos la mayoría de las calles en malas condiciones, nada más engravadas. Con cualquier lluvia quedan las lagunas porque hay hundimientos en casi todas, por lo mismo de que pasan muchos camiones”, indicó la señora Elena Hernández, quien refirió, como ejemplo, las calles Primero de Mayo, Lázaro Cárdenas, Cuauhtémoc y Vicente Guerrero, entre otras.