Alcalde de Ixhuatlán del Café habría despedido injustificadamente a más de 10 trabajadores

Por no aceptar apoyar al candidato Miguel Ángel Sedas, de la coalición integrada por los partidos Revolucionario Institucional y Verde Ecologista de México, , el alcalde de Ixhuatlán del Café, Luis Enrique Hernández Delfín, despidió de manera injustificada a más de diez trabajadores sindicalizados.

Los inconformes, por esta determinación del edil, dieron a conocer que desde el inicio de su gestión administrativa ha incurrido en una serie de irregularidades que han afectado los programas de obras proyectadas para el beneficio de los habitantes de esta municipalidad.

Además, dijeron los quejosos, que pidieron se omitieran sus nombres por temor a las represalias, que a principios del presente año el propio edil organizó y financió un plantón en contra del Sindicato Único de Trabajadores al Servicio del H. Ayuntamiento de Ixhuatlán del Café, el cual fue evidenciado por las propias personas involucradas en este asunto.

Estas personas, indicaron, les dieron a conocer que por su participación fueron objeto de beneficios personales, materiales y económicos, como es el caso de la inclusión a los programas de mejoramiento de vivienda, introducción de drenaje y, en algunos casos, el pago de salarios para promover el voto en favor del PRI, de la que es miembro el propio edil.

Señalaron que Hernández Delfín se vale de un grupo de mujeres, que se dicen ser la base priísta del municipio, para amenazar e intimidar a los ciudadanos para obligarlos a votar por su partido en estas elecciones, incluso, les obligan a entregar sus credenciales para evitar que sufraguen por otro partido.

Ante esta situación, hicieron pública la denuncia porque ya están cansados de las arbitrariedades del edil y en breve recurrirán al amparo de las autoridades laborales correspondientes, para que intervengan y sean reinstalados en sus puestos de trabajo, ya que los trabajadores, por el solo hecho de laborar en una institución pública y considerarse servidores públicos, deben estar ajenos a las cuestiones partidistas, sobre todo en tiempos electorales, por la comisión de delitos en el que pueden incurrir.