A los Órganos Internos de Control de los ayuntamientos corresponde vigilar, prevenir y sancionar que los ediles se asignen salarios excesivos. Al reconocer lo anterior, Delia González Cobos, auditora general del Órgano de Fiscalización Superior (ORFIS), manifestó que cuando se detecta en los tabuladores pagos excesivos de salarios, se hace la observación administrativa y se notifica a los Órganos Internos de Control.
Cabe mencionar que durante la revisión de la Cuenta Pública 2023, el ORFIS detectó en algunos ayuntamientos un incremento en el presupuesto del Capítulo 1000, que corresponde a servicios personales (pago de salarios).
En ese sentido, quedó a la luz que por cada 100 pesos que ingresan a las arcas de los municipios, al menos, 32 pesos se destinan para el pago de sueldos, salarios, prestaciones de la base trabajadora. Inclusos, hay remuneraciones por servicios personales que rebasan el tabulador de sueldo autorizado o que otorgan anticipos a sueldos y salarios, no amortizados y/o recuperados.
“Ese tipo de situaciones corresponde al Órgano Interno de Control sancionarlo, o sea, hacer las recomendaciones y dar un seguimiento a esto. Nosotros lo que revisamos es el ingreso y la manera en que se gastó en los términos generales”.
Agregó que alguien que excede lo que está previsto en la Constitución acerca de las remuneraciones que debe percibir un servidor público tiene que ver con que el Cabildo apruebe esos pagos que se van a hacer. “El Cabildo es quien tiene en esos momentos la facultad para determinar si hay o no un ingreso que excede lo que está establecido en ley”.