El secretario de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN), Antonio Gómez Pelegrín, admitió en reuniones previas con el Congreso Agrario Permanente (CAP), el desvío de recursos etiquetados inicialmente para proyectos agrícolas, denunció el secretario técnico del CAP, Anastasio del Ángel Román.
Acusó que el Gobierno del Estado, desde el ejercicio 2015, adeuda cerca de 400 millones de pesos al CAP destinados para el pago de proyectos productivos y por lo mismo, la SEFIPLAN solicitó a los acreedores destruir sus facturas del año pasado, por lo tanto presumió un fraude con las asociaciones.
“Tuvimos una reunión con el Secretario de Finanzas [Gómez Pelegrín] y él aceptó que el recurso destinado para el campo lo habían desviado y pidió que le diéramos el voto de confianza y en ocho días nos resolvía el problema para el pago de proyectos, y a la fecha transcurrieron cuatro meses”, narró Del Ángel Román.
“Él lo aceptó, que había sido error de él porque habían desviado un recurso, pero que les iba a llegar un recurso fresco y que ellos iban a tomar para enderezar la situación, (...) se supone que iba a hablar con el Secretario de Hacienda para que bajaran el recurso”, añadió.
“Ahora nos están diciendo que quieren que las facturas de 2015 las rompamos y que facturemos con fecha de 2016, esto no puede ser posible porque ya los compañeros productores ya pagaron la factura y ese es el gran problema que traemos ahorita”, relató Anastasio del Ángel.
Lo anterior, a pesar de las reuniones entre el CAP con el secretario de Desarrollo Agropecuario, Rural y Pesca (SEDARPA), Ramón Ferrari Pardiño, aunque a la fecha no existe solución a sus demandas.
“Hemos tenido reuniones con el doctor (Ramón) Ferrari, ha habido disposición, pero nos han traído a largas y largas”, dijo.
“Estamos peor que antes y cada día el campo es más rezagado y no recibimos respuesta alguna de nada y cada día el campo es peor”, criticó.
Demandó al gobierno electo analizar los perfiles de los posibles aspirantes a la titularidad de la SEDARPA, de modo de que la Secretaría sea dirigida por la persona idónea para las políticas del campo.
“Porque ya basta de que los funcionarios están detrás de los escritorios y no saben absolutamente nada y estamos en retroceso”, exigió el dirigente agrario.
No ocultó el temor de los campesinos por el cierre del sexenio y la falta de pago para proyectos productivos, o la no aclaración de los desvíos.