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El video atribuido a un paramédico del Centro Regulador de Urgencias Médicas (CRUM) Veracruz ha provocado fuerte polémica en redes sociales debido a la manera en que actuó durante la atención al accidente donde un autobús del servicio suburbano volcó y dejó múltiples heridos, entre ellos estudiantes de Telebachillerato menores de edad.
Las imágenes, enviadas a esta Redacción, habrían sido grabadas por el propio servidor público, quien posteriormente las habría distribuido a diversos medios de comunicación. En el material se observan conductas que podrían constituir omisiones en la atención, desobediencia a autoridades en el sitio y exposición indebida de víctimas.
En la grabación se aprecia al paramédico caminar entre los lesionados mientras enfoca directamente los rostros de varios menores. Un miembro de una agrupación voluntaria le indica el estado de pacientes “verdes” y le comunica que aún hay 3 personas clasificadas como “rojas”, es decir, de gravedad. No obstante, el funcionario del CRUM no se incorpora a las labores de auxilio y continúa registrando imágenes.
Además, el paramédico cruza la zona acordonada y se aproxima al autobús sin autorización, aun cuando un policía le ordena mantenerse alejado. Pese a ello, se acerca para grabar a una joven presuntamente sin vida atrapada junto a la unidad. Cuando el elemento policial intenta retirarlo y le pide dejar de tomar fotografías, el paramédico responde de forma desafiante: “Es mi reporte. ¿Quieres que te enseñe quién soy yo? Yo soy del Centro Regulador.”
El material también recoge el momento en que un familiar le ruega que deje de grabar, informándole que la joven fallecida es su sobrina. Aun así, el paramédico insiste en que “debe enviar evidencia”, pese a que ninguna normativa autoriza al CRUM a recopilar y difundir imágenes de víctimas, mucho menos de menores o personas fallecidas.
De confirmarse la autenticidad del video, las acciones podrían contravenir la Ley de Protección de Datos Personales en Posesión de Sujetos Obligados, así como la NOM-034-SSA3-2013, que regula la atención médica prehospitalaria. Esta establece que el CRUM está obligado a coordinar la asistencia en campo, no a grabar ni distribuir material visual de los lesionados.
Crisis interna en el sistema de emergencias
Este episodio ocurre en medio de cuestionamientos hacia la Secretaría de Salud, cuyo titular Valentín Herrera asegurara públicamente que no había fallecido ninguna estudiante en la volcadura del autobús Miradores en la comunidad El Palmar desconociendo el deceso de la joven Celeste, de 18 años. Sus declaraciones evidenciaron que no contaba con la información correcta, presuntamente porque el CRUM no le habría proporcionado el listado de lesionados ni la confirmación del fallecimiento.
El comportamiento del paramédico que grabó y filtró el video ahonda la percepción de desorden operativo dentro del CRUM, señalando falta de supervisión, ausencia de controles internos y precariedad en la cadena de mando de una institución que, por normativa, debería fungir como eje coordinador de los servicios de emergencia.
Preguntas pendientes
El caso plantea interrogantes que la Secretaría de Salud deberá responder como ¿Quién autorizó la grabación y difusión de imágenes de menores lesionados?, ¿por qué el personal del CRUM desatendió indicaciones de triaje y órdenes policiales en zona restringida?, ¿qué supervisión existe sobre los paramédicos que actúan en campo?, ¿cuál es el motivo de que información oficial no llegue oportunamente al titular de la dependencia?, ¿qué medidas se implementarán para evitar que hechos similares se repitan?
Por ahora, el video difundido por el propio paramédico ha abierto un debate urgente sobre ética profesional, legalidad y el evidente deterioro institucional del sistema de emergencias médicas en Veracruz.