Este sábado 19 de abril, las iglesias de Xalapa vivirán uno de los momentos más importantes del calendario litúrgico: el Sábado de Gloria, una jornada de recogimiento y contemplación que prepara el corazón de los fieles para la Resurrección de Cristo.
El párroco José Manuel Suazo Reyes, explicó que durante la mañana, la Iglesia permanece en silencio ante la tumba del Señor, en actitud de oración expectante. Este día no se celebran misas hasta la noche, como expresión de duelo y espera por la promesa de la vida nueva.
Por la tarde-noche, se lleva a cabo la Vigilia Pascual, la celebración más solemne del año litúrgico, en la que se proclama el misterio central de la fe cristiana: la Resurrección de Jesús. En Xalapa, diversas parroquias celebrarán esta liturgia con gran devoción:
- La Parroquia de San José dará inicio a la Vigilia Pascual a las 20:00 horas.
- En la Catedral Metropolitana, la ceremonia comenzará a las 19:30 horas, presidida por el Arzobispo.
- La Iglesia de San Jerónimo celebrará su Vigilia a las 21:00 horas, con participación de varias comunidades.
La Vigilia Pascual está compuesta por 4 momentos simbólicos: el Lucernario (bendición del fuego nuevo y encendido del Cirio Pascual), la Liturgia de la Palabra, la Liturgia Bautismal y la Liturgia Eucarística. Cada parte nos conduce espiritualmente desde la oscuridad hacia la luz del Cristo Resucitado, refirió el clérigo.
Como explica Suazo Reyes, la Vigilia Pascual es la vigilia más importante del año, “porque en ella celebramos la Resurrección de Jesús, el misterio central de nuestra fe. Es en esta celebración donde resuenan nuevamente las campanas y el júbilo recorre los templos”.
En esta vigilia también se renuevan las promesas bautismales, se entona el Gloria y se realiza una lectura profunda de los textos del Antiguo Testamento que relatan la historia de la salvación.
Los fieles están invitados a vivir este día no como una simple tradición, sino como una oportunidad para profundizar en su espiritualidad y conectar con la esperanza de la vida nueva.
“Que la celebración de la Semana Santa nos lleve a reforzar nuestra espiritualidad para sanar también el corazón y la mente de todas aquellas cosas que también destruyen el interior. Que la cruz de Cristo nos libre de los signos de muerte que nos acechan”, finalizó Suazo Reyes.