Un olor fétido invade la zona de la laguna de Casa Blanca, donde vecinos aseguran que el cuerpo de agua “huele a muerte” y advierten una posible contaminación tras la aparición de peces muertos en la superficie.
La semana pasada, residentes de la colonia Casa Blanca reportaron una preocupante mortandad de peces –principalmente mojarras y guapotes– que flotaban sin vida en la laguna. Aunque no se ha confirmado la causa, las sospechas apuntan a escurrimientos contaminados con sustancias tóxicas o aguas negras provenientes de la avenida principal después de las lluvias recientes.
“Sí hubo muchos peces muertos, los que flotaron ya estaban muertos. La laguna se ve más turbia y el olor es muy feo”, relató Eleuterio Hernández, vecino de la zona.
Durante un recorrido en el área, se constató que el mal olor es más intenso cerca de la privada Octavio Ramos. Además, se observaron residuos sólidos y botellas abandonadas por visitantes, lo que agrava el deterioro del entorno.
Los habitantes señalan como posible causa la llegada de escurrimientos desde la avenida Antonio Chedraui Caram y la calle Bahamas, donde desemboca infraestructura de drenaje pluvial. Aseguran que estos escurrimientos podrían contener aceite, veneno o incluso aguas negras.
Aunque hace pocos días personal de Medio Ambiente realizó una jornada de limpieza y retiró lirio acuático, los olores persisten. Los vecinos piden una investigación urgente para determinar las causas exactas de la contaminación y evitar daños mayores al ecosistema local. “La laguna necesita atención urgente. Aquí jugaban los niños y era un espacio bonito, pero ahora apesta”, lamentaron.