Vendrán otros tiempos

Claro que vendrán otros tiempos, le respondería al amigo que me hace el vaticinio, sobre todo porque se trata de un político en toda la extensión de la política, que ha sabido sortear todos los problemas que sus adversarios le han ido sembrando a lo largo de su exitoso camino dentro de la vida política estatal y nacional, anteponiendo la ley y la justicia ante todo.


Desde el proceso electoral del 2018, cuando Morena arrasó electoralmente en todo el país capitalizando la inconformidad y el hartazgo que sentimos en esos tiempos hacia quienes usaban los partidos políticos PRI y PAN para usurpar el poder y usarlo en su beneficio personal, entre otras cosas, para torcer la ley a su antojo, para aplacar cualquier inconformidad mediante la represión, para amasar fortunas y para coludirse con miembros de las bandas de la delincuencia organizada, se comenzó a fraguar un perverso plan de confrontación social entre las clases más jodidas, entre los pobres de este país, y las clases medias y medias altas.

El autor de este maléfico proyecto fue el tabasqueño Andrés Manuel López Obrador, un sedicente luchador social surgido de las filas del Partido Revolucionario Institucional (PRI), con la esperanza de alcanzar pronto el poder y la fortuna, pero como en esos tiempos se requería conocimiento, academia y cultura, el tipo fue rechazado en cuanto intento hacía por sobresalir, hasta que se le pegó a Cuauhtémoc Cárdenas Solórzano, no muy avispado y menos erudito, pero al menos arrastrando el prestigio de su señor padre don Lázaro Cárdenas del Río, el autor de la expropiación petrolera que tanto beneficio trajo al país.

Sí, porque por radio nacional, a las 22:00 horas del 18 de marzo de 1938, el presidente Lázaro Cárdenas del Río decretó la expropiación de las empresas petroleras. El Gobierno se apropió legalmente de 17 compañías extranjeras que controlaban la industria. En su mensaje a la nación dejó claro que, conforme a la situación del país, de la industria y de los trabajadores, no existía otra opción; “habiendo quedado rotos los contratos de trabajo entre las compañías y sus trabajadores, por haberlo así resuelto las autoridades del trabajo, de no ocupar el Gobierno las instalaciones se procedió”.


Ese golpe, en un mundo dominado por el petróleo, le dio a México un lugar preponderante que no tenía. El país estaba sobre importantes yacimientos de petróleo y ahí nació PEMEX, y ahí el gobierno mexicano sentó sus esperanzas de crecimiento, en el petróleo.

¿Cuántos años México dependió en su economía del petróleo?... muchos, y lo digo así ciertamente por no tener el dato a la mano, pero en un mundo cuya energía estaba basada solamente en el petróleo el nuestro era muy afortunado. Recuerdo que Fidel Herrera siendo gobernador, un día en que despidió con arpas, jaranas y bailarines, a un feliz Vicente Fox Quesada, me comentó: valió la pena nos dejó diez mil millones de dólares de los alcances petroleros del año.

La economía en aquellos años, no muy lejanos por cierto, dependía de la venta del petróleo; el segundo ingreso lo ubicaban los economistas en la industria manufacturera, y el tercero en las remesas que envían nuestros paisanos de los Estados Unidos, que se juegan el pellejo en aquel país para encontrar un empleo (de lo que sea) y mandar dinero a sus familias que dejaron en México, porque aquí no encontraron empleo.


En México había dinero para hacer lo que se quisiera, no había gobierno porque los que estaban al frente dejaron de pensar en crecimiento nacional para hacerlo personal. Las pandillas de corrupción comenzaron a aparecer por todas las instituciones donde se manejaban millones de pesos para echarlos a sus bolsillos, y en estas condiciones el país comenzó a hacer agua; ricos los que están en el poder, pobres los que no. Y entre los ambiciosos que no tuvieron acceso al dinero público estaba Andrés Manuel López Obrador, a quien la clase política mexicana despreciaba por su repugnante comportamiento de carretonero.

Ahí es donde AMLO se agarró para difundir una ideología de confrontación entre los que tenían recursos y los que no. Afirmando, como lo hace hasta la fecha, que los que tienen es porque son corruptos, porque han robado, porque lo que tienen es producto de raterías y los que no tienen es porque los otros no les dejan nada. O sea, eres pobre porque los ricos te quitan lo que te pertenece. Con eso y con sus alianzas con los narcotraficantes, la entrega del poder a la Secretaría Armada de México y la Marina, AMLO tiene al país en un puño.

Pero está equivocado y coincido con el amigo que me dijo: Vendrán otros tiempos. Los mexicanos no somos un país de mediocres, no, al contrario. Por mucho tiempo fuimos tolerantes, pero no pendejos, hoy eso que llaman “Marea Rosa”, los grupos o asociaciones civiles, los miembros de las distintas creencias y religiones, tenemos los tamaños suficientes para rescatar al país de los holgazanes como los hijos de AMLO que en su vida han trabajado en nada y hoy son millonarios con un papi presidente.


Me voy a defender; Yunes Márquez

En el medio político de Veracruz, el tema más importante es sin duda la persecusión que se armó contra Miguel Ángel Yunes Márquez, senador electo por el PAN, quien pese a tener en su contra una absurda orden de aprehensión, aseguró ayer lunes 15 de julio que representará en el Senado de la República a los veracruzanos a pesar de que existe una orden de aprehensión en su contra.

En entrevista con Ciro Gómez Leyva, el panista lamentó que lo acusen de haber presentado una constancia de residencia apócrifa, de mentir a las autoridades y fraude procesal, por lo que estas acciones las calificó de “una clara persecución política. Es un tema realmente burdo, es un tema que casualmente, a unos meses de rendir protesta como senador de la República, reviven un tema de 2021 que estaba ya archivado, que no tiene ningún fundamento”, acusó.


Además, argumentó que el pasado jueves las autoridades decidieron girar una orden de captura después de que Yunes Márquez decidiera pararse de la audiencia para seguir su tratamiento de la columna. “Después de 7 horas de estar en la audiencia, les comenté que tenía que levantarme a caminar un poco y a tomar mis medicinas, casualmente toman esto como excusa, declaran un receso y esa misma noche me dictan orden de aprehensión”, añadió.

Por esta razón, el exdiputado por Veracruz recalcó que las autoridades buscan revivir la acusación “absurda” de 2021 porque “no tienen absolutamente nada en contra mía”, por lo que presentará un amparo para defenderse y así continúar en el cargo como senador. Lea el artículo. “Estoy en proceso de presentar un amparo, me voy a defender, estoy totalmente convencido de que les voy a ganar, que no tienen la razón y que seré el representante de los veracruzanos en el Senado de la República porque los veracruzanos lo quisieron”, sostuvo.

Asimismo, Yunes Márquez argumentó que enfrenta estos delitos porque una fiscal busca quedar bien con Rocío Nahle, gobernadora de Veracruz, quien está en su contra: “Los delitos de los cuales se me acusan, ninguno de ellos es delito grave... una fiscal quiere quedar bien con Rocío Nahle y quiere quedarse en el cargo, entonces yo soy de alguna manera el vehículo para poderlo lograr”.


Ya veremos quién gana en este enfrentamiento político, si el grupo que encabeza Eric Cisneros Burgos, con la Fiscal Verónica Hernández y el timorato Cuitláhuac García, o el senador electo Miguel Angel Yunes Márquez. La gobernadora electa Rocío Nahle es espectadora pero consciente de la traición que le jugaron para bajarla de la candidatura entre Eric Cisneros, Cuitláhuac García y la Fiscal...

REFLEXIÓN

José Manuel Pozos Castro es un artista de la política: fue director del C4 con Miguel Alemán; diputado local y federal por el PRI; coordinador de la campaña al gobierno por el PAN de Miguel Angel Yunes; diputado local por Morena y presidente del Congreso Local y hoy presidente municipal de Tuxpan por Morena y el más Nahalista de todos los morenos de Veracruz. Mas bien es versátil... ¿o ladino?


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