24 de marzo de 2025
alcalorpolitico.com
Aunque en menor dimensión al choque que ha comenzado a darse entre Morena y su aliado el PVEM en estados como Quintana Roo y San Luis Potosí, en Veracruz también se están dando roces entre ambos partidos de la 4T, que obligaron a modificar su convenio de coalición en varios municipios, entre ellos los de Alvarado y el puerto de Tuxpan, donde cada quien postulará candidatos propios a las alcaldías.
El columnista de El Universal, Salvador García Soto, en un texto que publicó este sábado, señalaba que “el futuro de la alianza electoral entre Morena y el Partido Verde se ve más que tenso, incierto”, y que “si ya la reforma antinepotismo de la presidenta Sheinbaum y la imposición de los Verdes para mandarla a 2030 y no a 2027 como pedía la mandataria, exhibió la fractura y el choque entre el partido gobernante y uno de sus partidos satélite, lo que viene en Cancún y en Quintana Roo para el 2027 va a cimbrar el matrimonio político de conveniencia entre los verdes y el oficialismo de la 4T”.
El autor de la columna Serpientes y Escaleras reseñó el golpeteo que, en ambas entidades, actualmente gobernadas por el PVEM, han comenzado a darse entre los aspirantes del partido del tucán y sus grupos contra los de Morena por las gubernaturas que habrán de disputarse dentro de dos años. En Quintana Roo, por ejemplo, el “Niño Verde” Jorge Emilio González y la gobernadora Mara Lezama, iniciaron una guerra en contra de los morenistas del Grupo Tabasco tras el retorno como director de la Agencia Nacional de Aduanas de Rafael Marín Mollinedo, fundador del partido guinda en esa entidad caribeña, el cual es visto como un fuerte opositor interno del joven exsecretario de Finanzas, Eugenio “Gino” Segura, actual senador quintanarroense y la carta fuerte de los verdes.
Y en San Luis Potosí, el otro estado que gobiernan estos dos partidos de la 4T, la ruptura de su alianza en los comicios estatales de 2027 ya está prácticamente cantada, según asegura el columnista García Soto, pues refiere que el Verde perfila como su candidata a la gubernatura a la senadora Ruth Miriam González Silva, esposa del actual mandatario potosino Ricardo “El Pollo” Gallardo Carmona, mientras que Morena impulsaría a la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, o a su hermana Rita Rodríguez.
Es decir que si el matrimonio Morena-Verde se va a divorciar en estos estados que hoy gobiernan, bajo los argumentos de los morenos de que los del tucán “les exigen demasiado, mientras los verdes se sienten injustamente tratados por el oficialismo, habrá que ver si van juntos a la elección federal intermedia por la Cámara de Diputados y en las otras 14 gubernaturas que también se renuevan en 2027, porque si el rompimiento se agudiza y sobreviene el divorcio, eso sí alteraría la correlación de fuerzas en la próxima legislatura de San Lázaro e incidiría en las elecciones de varios gobiernos estatales”, advierte el acucioso analista político.
Pero, antes, habrá que ver el saldo en las elecciones municipales de Veracruz, sobre todo en la disputa por las alcaldías de Alvarado y Tuxpan, donde en el primer caso Morena impuso a Hipólito Deschamps, excandidato a gobernador de Movimiento Ciudadano –lo que motivó una desbandada de alvaradeños fundadores del partido obradorista–, y la alcaldesa verde Lizzette Álvarez Vera, que impulsaba inicialmente a su hermana Charito, finalmente aceptó que el PVEM perfilara a Ángel Alberto Cobos Márquez, uno de sus más fieles militantes. En tanto, en el puerto huasteco, los guindas nominarán al diputado local Daniel Cortina, allegado al exalcalde y actual subsecretario de Gobierno, José Manuel Pozos Castro, y los del tucán postularán al duartista Alberto Silva Ramos, cercano al diputado federal Javier Herrera Borunda –uno de los prospectos viables del ecologista para la gubernatura veracruzana en el 2030– y al influyente coordinador en el Senado, Manuel Velasco Coello.
RAFA CASTILLO ZUGASTI, INVITADO POR EL BID A SANTIAGO DE CHILE
A partir de mañana se realiza en Santiago de Chile, allá en el Cono Sur, la Asamblea de Gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo, la cual es la más alta autoridad responsable de la gobernanza del BID.
Los integrantes de la Asamblea son los encargados de las finanzas públicas, léase Secretarios o Ministros de Hacienda, de cada uno de los 37 países que son miembros de tal institución de banca de desarrollo internacional.
Solamente dos mexicanos estarán presentes en calidad de invitados especiales, muy aparte, por supuesto, del personal de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, cuyo nuevo titular es el doctor Édgar Abraham Amador Zamora, el cual encabeza la misión de México que participará en tal evento. Uno es la recién reelecta alcaldesa morenista del puerto de Acapulco, Guerrero, Abelina López Rodríguez, una edil muy identificada con el excanciller y actual Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, la cual expondrá temas referentes a la resiliencia de las ciudades en la actualidad ante las catástrofes naturales, y, el otro, es un político veracruzano conocedor de los temas de gestión pública y administración municipal, Rafael Castillo Zugasti, economista y abogado, quien sorpresivamente fue convocado por el propio BID para participar en su plenaria de Gobernadores.
Sí, aunque usted no lo crea, en Veracruz hay talento. Sólo falta apoyarlos.
El columnista de El Universal, Salvador García Soto, en un texto que publicó este sábado, señalaba que “el futuro de la alianza electoral entre Morena y el Partido Verde se ve más que tenso, incierto”, y que “si ya la reforma antinepotismo de la presidenta Sheinbaum y la imposición de los Verdes para mandarla a 2030 y no a 2027 como pedía la mandataria, exhibió la fractura y el choque entre el partido gobernante y uno de sus partidos satélite, lo que viene en Cancún y en Quintana Roo para el 2027 va a cimbrar el matrimonio político de conveniencia entre los verdes y el oficialismo de la 4T”.
El autor de la columna Serpientes y Escaleras reseñó el golpeteo que, en ambas entidades, actualmente gobernadas por el PVEM, han comenzado a darse entre los aspirantes del partido del tucán y sus grupos contra los de Morena por las gubernaturas que habrán de disputarse dentro de dos años. En Quintana Roo, por ejemplo, el “Niño Verde” Jorge Emilio González y la gobernadora Mara Lezama, iniciaron una guerra en contra de los morenistas del Grupo Tabasco tras el retorno como director de la Agencia Nacional de Aduanas de Rafael Marín Mollinedo, fundador del partido guinda en esa entidad caribeña, el cual es visto como un fuerte opositor interno del joven exsecretario de Finanzas, Eugenio “Gino” Segura, actual senador quintanarroense y la carta fuerte de los verdes.
Y en San Luis Potosí, el otro estado que gobiernan estos dos partidos de la 4T, la ruptura de su alianza en los comicios estatales de 2027 ya está prácticamente cantada, según asegura el columnista García Soto, pues refiere que el Verde perfila como su candidata a la gubernatura a la senadora Ruth Miriam González Silva, esposa del actual mandatario potosino Ricardo “El Pollo” Gallardo Carmona, mientras que Morena impulsaría a la secretaria de Gobernación, Rosa Icela Rodríguez, o a su hermana Rita Rodríguez.
Es decir que si el matrimonio Morena-Verde se va a divorciar en estos estados que hoy gobiernan, bajo los argumentos de los morenos de que los del tucán “les exigen demasiado, mientras los verdes se sienten injustamente tratados por el oficialismo, habrá que ver si van juntos a la elección federal intermedia por la Cámara de Diputados y en las otras 14 gubernaturas que también se renuevan en 2027, porque si el rompimiento se agudiza y sobreviene el divorcio, eso sí alteraría la correlación de fuerzas en la próxima legislatura de San Lázaro e incidiría en las elecciones de varios gobiernos estatales”, advierte el acucioso analista político.
Pero, antes, habrá que ver el saldo en las elecciones municipales de Veracruz, sobre todo en la disputa por las alcaldías de Alvarado y Tuxpan, donde en el primer caso Morena impuso a Hipólito Deschamps, excandidato a gobernador de Movimiento Ciudadano –lo que motivó una desbandada de alvaradeños fundadores del partido obradorista–, y la alcaldesa verde Lizzette Álvarez Vera, que impulsaba inicialmente a su hermana Charito, finalmente aceptó que el PVEM perfilara a Ángel Alberto Cobos Márquez, uno de sus más fieles militantes. En tanto, en el puerto huasteco, los guindas nominarán al diputado local Daniel Cortina, allegado al exalcalde y actual subsecretario de Gobierno, José Manuel Pozos Castro, y los del tucán postularán al duartista Alberto Silva Ramos, cercano al diputado federal Javier Herrera Borunda –uno de los prospectos viables del ecologista para la gubernatura veracruzana en el 2030– y al influyente coordinador en el Senado, Manuel Velasco Coello.
RAFA CASTILLO ZUGASTI, INVITADO POR EL BID A SANTIAGO DE CHILE
A partir de mañana se realiza en Santiago de Chile, allá en el Cono Sur, la Asamblea de Gobernadores del Banco Interamericano de Desarrollo, la cual es la más alta autoridad responsable de la gobernanza del BID.
Los integrantes de la Asamblea son los encargados de las finanzas públicas, léase Secretarios o Ministros de Hacienda, de cada uno de los 37 países que son miembros de tal institución de banca de desarrollo internacional.
Solamente dos mexicanos estarán presentes en calidad de invitados especiales, muy aparte, por supuesto, del personal de la Secretaría de Hacienda y Crédito Público, cuyo nuevo titular es el doctor Édgar Abraham Amador Zamora, el cual encabeza la misión de México que participará en tal evento. Uno es la recién reelecta alcaldesa morenista del puerto de Acapulco, Guerrero, Abelina López Rodríguez, una edil muy identificada con el excanciller y actual Secretario de Economía, Marcelo Ebrard, la cual expondrá temas referentes a la resiliencia de las ciudades en la actualidad ante las catástrofes naturales, y, el otro, es un político veracruzano conocedor de los temas de gestión pública y administración municipal, Rafael Castillo Zugasti, economista y abogado, quien sorpresivamente fue convocado por el propio BID para participar en su plenaria de Gobernadores.
Sí, aunque usted no lo crea, en Veracruz hay talento. Sólo falta apoyarlos.