Un tercio de las enfermedades, por condiciones ambientales nocivas: Nemi

El secretario de Salud, Juan Antonio Nemi Dib, indicó que entre el 25 y el 33 por ciento de los cuadros patológicos, casi la tercera parte de los casos de enfermedades, tiene por lo menos un determinante ambiental.

Reconoció que en algunos casos, como las mujeres indígenas que usan lumbre de leña para cocinar, "sigue siendo un asunto de justicia social, un asunto de equidad que obliga a preguntar si verdaderamente somos demócratas, si verdaderamente estamos actuando con justicia, cuando tenemos ciudadanos que consumen energía de primera y ciudadanos que la consumen de segunda".

Previo al Primer Foro Estatal de Salud Ambiental, expuso que ciertas características genéticas se ven ya limitadas para mal, ya exacerbadas para mal, incluso patologías detonadas por causas ambientales cuando pudieron retrasarse o evitarse.



El funcionario estatal comentó que si la causa de esas patologías tienen que ver con la forma de vivir, si los costos sociales, familiares, son el resultado de cómo vivimos la vida, es evidente que cambiando patrones de conducta se pueden mejorar los cuadros patológicos.

Para ello se necesita calidad de agua, aire, sustancias peligrosas, hábitos no saludables vinculados al medio ambiente y "ahí estamos ante un coctel que puede resultar explosivo".

"No es por decreto como vamos a convencer a los ciudadanos de que racionalicen su consumo de energía (...) ", expresó.



Una de las evidencias más notorias de lo que está ocurriendo en la vida contemporánea de las generaciones es que los factores ambientales tienen una incidencia inmediata, clara y directa en la calidad de vida de las personas, comentó.

12 millones de muertes al añoen el mundo por cuestiones ambientales

De acuerdo a expertos de la Organización Mundial de la Salud (OMS), al menos 12 millones de muertes al año ocurren en el mundo por determinantes ambientales, aseveró.



A diferencia de enfermedades genéticas, accidentes imprevisibles, son causales antropogenicas, es decir, producidas por el estilo de vida que se lleva y que por lo tanto son evitables.

Esto tiene un símil y es el dengue, pues aquí se puede afirmar que de nada sirve la terapéutica si no hay la prevención, "sin larvas no hay mosquitos, sin mosquitos no hay dengue, pero qué necesitamos, que no haya criaderos".

Asimismo, recordó que otro problema es las Enfermedades Pulmonares Obstructivas Crónicas (EPOC), donde la mayoría de las víctimas son mujeres indígenas por usar lumbre de leña, pero "hemos sido incapaces de darles alternativas energéticas".