Septiembre: mes de terremotos y fatalidades

De acuerdo a una leyenda Maya, los temblores son ocasionados por los movimientos que una colorida serpiente de cascabel realiza cuando se oculta en el subsuelo, huyendo de las discordias humanas. Su presencia sobre la tierra, en sus orígenes, era señal de buenos augurios porque traía agua y cosechas en abundancia, pero una vez iniciadas las guerras fratricidas, se hundía en las entrañas de la tierra provocando sequías y tragedia. Cuando la paz llegaba, volvía a salir.

Junto con Quetzalcóatl, (la serpiente emplumada) vendrían a representar la dualidad génesis y destrucción, respectivamente. Esta cosmogonía indígena moldeó el sentido mágico del ciclo vida-muerte-vida propio de nuestro SER nacional. En nuestra sangre viven lo fantástico, lo asombroso, lo fascinante y lo seductor como modeladores del destino. El pueblo transforma la repentina tragedia en oportunidad para expresar su fraternidad hacia el “manito”, víctima de la FATALIDAD.

Desde el CALDERONATO, en México se ha inducido una guerra fratricida y de exterminio permanente: la serpiente sale a ratos, pero vuelve a sepultarse, triste al observar el saldo diario de dolor e impunidad que nos deja aquella. Su naturaleza vitalista le impide permanecer en un lugar donde miles claman por su

desaparecido, torturado o despedazado sin esperanza de Justicia. Por eso sacude la Patria desde el pasado 7 de septiembre. Ante la multiplicación de la solidaridad social expresada el martes 19, cabe esperar su regreso. Se crea o no en lo sobrenatural, lo cierto es que el reencuentro entre hermanos seguramente traerá buenos frutos.

El mito de la serpiente viene al caso por dos razones: 1) algunos de los hechos históricos más trascendentes para de México han ocurrido en el NOVENO mes del año y 2) el numero de letras contenidas en la palabra SERPIENTE coinciden con ese número, precisamente. Frente a la ausencia de gobernantes dignos, la desgracia es la fuerza unificadora de nuestra orfandad común. Abajo se citan algunos hechos históricos registrados en este mes de SEPTIEMBRE:

16 (1810): se alza el pueblo en armas, para luchar por su libertad y la independencia de México.



27 (1821): entra el ejército Trigarante a la capital, dejando atrás más de un millón de muertos.

13 (1847): El invasor Yanqui toma del castillo de Chapultepec, asesinando a los niños héroes, abandonados a su suerte por Santana (presidente de México) y algunos oficiales del ejército mexicano.

14 (1847): Un soldado de E.U. es abatido de un certero balazo anónimo cuando iza la bandera norteamericana en zócalo. El pueblo, que resiste hasta con piedras, es masacrado ante la cobarde traición de los poderes formales y a México le despojan de más de la mitad de su territorio.



16 (1925): los restos de 12 héroes son depositados en el Ángel de la Independencia. Este monumento cae derrumbado por el temblor de 1957. En el año 2010 se informó al pueblo ¿para continuar con el despojo de identidad? que las osamentas correspondían a nuestros próceres.

26 (1949): se anuncia que los restos óseos encontrados en la Iglesia de Santa María la Asunción (Ichcateopan, Guerrero) no pertenecen a Cuauhtémoc, ultimo emperador azteca (más orfandad).

27

(1952): se inaugura el “Altar a la Patria”. Un representante yanqui hace una ofrenda floral, la cual es retirada en la noche por cadetes anónimos y tirada frente a la embajada gringa, construida, por cierto, sobre la fosa común donde sepultaron a los mexicanos caídos en la defensa del Castillo.

14 (1968): son masacrados impunemente 3 jóvenes en San Miguel Canoa.



19 (1985): Un temblor causa la muerte de entre 20 000 (John Gavin) a 40 mil mexicanos (Sistema Sismológico Nacional). En las labores de rescate participan más de 1 500 000 ciudadanos. Devoto a su ineficacia el tlatoani Miguel de la Madrid rechaza la ayuda internacional (al inicio) diciendo: “México tiene los suficientes recursos y unidos pueblo y gobierno, saldremos adelante”.

22 (1985): las autoridades comienzan a sepultar miles de cuerpos en fosas comunes. Desde el poder, como siempre, se cometen actos de rapiña con la ayuda nacional y extranjera.

30 (1999): ocurre un temblor de intensidad 7.5 en Oaxaca dejando un saldo de 50 muertos.



15 (2008): a pesar de ser previamente avisados, Felipe Calderón (el espurio) y Leonel Godoy (gobernador) dejan desprotegidos a los asistentes al grito en Morelia del ataque con granadas, resultando 8 muertos y decenas de heridos. Por supuesto, persiste la impunidad.

26 (2014) la nomenclatura asesina a estudiantes y desaparece a 43 normalistas en Iguala Guerrero.

7 (2017): Los estados de Oaxaca, Tabasco y Chiapas sufren un fuerte temblor de 8.2 grados (E.R)



19 (2017): Morelos, Guerrero, Oaxaca, México, Puebla, Tlaxcala y Michoacán son sacudidos por otro temblor (7.1 E.R.), dejando muerte y destrucción. Se reconocen cerca de 300 muertos, cientos de desparecidos, miles de lesionados e incalculables daños materiales.

Fatídicamente, son más las malas señales que las buenas, presentes en este mes interminable: lo confrontación asoma por todos lados. La clase llena de privilegios y los gobernados parecen irreconciliables. Los primeros amenazan al pueblo trayendo, en este MES PATRIO, al agresor yanqui en la figura del general

James Mattis, alias perro rabioso, ¡al grito y al desfile militar! presagiando más violencia, saqueo e impunidad. No extrañe entonces, ante la presencia del mensajero de la muerte, la huida del réptil de vida.

Con el último temblor, las redes sociales, están exhibiendo el divorcio entre gobierno y gobernados. Mientras los primeros buscan el lucimiento personal, los ciudadanos, con uñas y dientes salvan vidas. Fiel a su corrupción, Enrique Peña Nieto, rechaza la ayuda que Suiza ofrece para evaluar la construcciones dañadas. ¡Claro! debe proteger a las compañías inmobiliarias y funcionarios quienes permitieron construcciones violando las normas mínimas de seguridad. Con respecto a la tropa, le ordenarán actuar en cadena nacional pero, al final del día, sus uniformes terminarán limpios y sin mella sus herramientas. A la sociedad civil la bloquearán, eso sí, con eficiencia, impidiendo su participación organizada, porque representan un riesgo para “su seguridad nacional”.

Naturalmente, los políticos del sistema, fieles a su perversión, desviarán hacia sus bolsillos parte de los recursos gubernamentales destinados (300 mil millones) a la reconstrucción; algunas instituciones harán negocios con la ayuda, ocultando datos y solapando contubernios. Los bancos y grandes empresas, aprovecharán la oportunidad para extraer de clientes y empleados, donaciones en efectivo para promover su falsa imagen altruista y obtener beneficios fiscales. Emulando al “nuevo PRI” y a sus aliados,

muchas comercios e industrias lucrarán con el dolor ajeno: los negocios son primero.

Desde Xalapa, envío un abrazo a todos los afectados donde quiera que estén y un reconocimiento fraterno para los miles de héroes anónimos cuya entrega amorosa hacia el otro fortalecen el orgullo de ser Mexicanos. Igualmente, vaya una felicitación sincera por la congruencia del presidente del partido MORENA (AMLO) por su propuesta de donar el 50% de sus prerrogativas a los damnificados, a pesar de la negativa inicial de los títeres del INE y del sistema. Y, bienvenido su Plan de Reconstrucción Nacional y Apoyo a Damnificados, donde propone el retiro de prerrogativas políticas.