Una rampa mal construida afuera de un local en pleno centro de la ciudad fue demolido y vuelto a hacer, luego de que un vecino de Coatzacoalcos denunció que para él, que ocupa silla de ruedas, era imposible entrar al sitio. Fue el Ayuntamiento de Coatzacoalcos quien acudió a emitir un requerimiento para el propietario a fin de que quitara la rampa de la avenida Carranza.
El señor Orlando Oropeza una persona con discapacidad desde hace 30 años, manifestó que se llegó a un acuerdo con quienes habilitaron el acceso y se les solicitó corregirlo, con lo que él y otros podrán transitar sin problema.
“Me explicaron que iban a resolver el problema, posteriormente regresé y estaba gente del Ayuntamiento y albañiles y estaban empezando a trabajar y me explicaron que todo iba a quedar correcto”, declaró en entrevista telefónica.
Dijo que esto marca un precedente en la atención hacia este sector, además de que visibiliza las condiciones en las que están algunas calles y banquetas, pues aún hay varios obstáculos que no permiten que pasen las personas con su silla de ruedas, muletas, bastones o mujeres con sus carriolas. Insistió en que se debe promover la educación y el respeto hacia las personas con discapacidad.
Previamente don Orlando indicó que este acceso tenía mucho grosor y a él le impedía avanzar en su silla de ruedas sobre la banqueta, al igual que a otros transeúntes de la tercera edad.