Al menos 15 familias que habitaban viviendas en las inmediaciones de la Secretaría de Finanzas y Planeación (SEFIPLAN) y el bulevar Xalapa-Banderilla podrían quedarse sin un hogar.
A la fecha, las autoridades evalúan el riesgo de habitar esa zona después del deslave que se registró el primero de julio por la tormenta tropical “Chris”. Al respecto, el gerente de operaciones de la Comisión Municipal de Agua y Saneamiento (CMAS), Alfredo Colorado Acosta, dijo que están elaborando un dictamen de riesgo.
Recordó que esta zona afectada se ubica cerca de una gasolinera, en el bulevar Xalapa-Banderilla, a un costado de la SEFIPLAN, refiriendo que también se evalúa realizar una obra que garantice la seguridad y permanencia de los lugareños.
“Se evacuó a la población, con la atención de Protección Civil. La mayoría evacuó la zona y se va a hacer una atención de obra por parte del Ayuntamiento para poder auxiliar a la gente. Han de ser como unas 10 o 15 casas, pero las zonas donde se están deslavando no están viviendo y ya está trabajando el arquitecto para poder rehabilitar la zona. Hay que ver que se termine la obra y que Desarrollo Urbano realice un estudio geológico, estructural y de mecánica de suelo, si se pueden quedar asentados o pueden regresar”, explicó Colorado Acosta.
Afectaciones en El Moral
Respecto a la vivienda que resultó afectada en la colonia Rafael Hernández Villalpando, cerca de El Moral, el gerente señaló que la familia también podría ser desalojada, aunque sigue en análisis una obra que pueda descartar riesgos.
“No tienen ningún problema, se les está auxiliando con materiales para sus casas. El Gobierno del Estado entró a apoyar con Invivienda. De acuerdo con el dictamen y la situación que determine el Gobierno del Estado se puede poner un muro de contención”.
Xalapa 2000
Finalmente, el funcionario municipal refirió que el edificio afectado por las lluvias en Xalapa 2000 no significa un riesgo para las familias que viven ahí.
“Los técnicos de mecánica de suelo y estructural dijeron que el problema se puede reparar y ya se está trabajando por parte de Obras Públicas. Se va a reparar y sí se puede vivir”.
Señaló que los vecinos realizaron obras que impidieron el flujo del agua, además de que los muros de contención requieren hoyos en las partes bajas.
“En la parte baja, las trampas de agua y los colectores estaban tapados. Inclusive les pusieron cemento, cocheras de metal, con muros de tabique y cemento. Todo eso se taponó, el agua brincó (…). Como llovió bastante, se anegó, brincó el agua, la parte vegetal entre el muro y la parte alta se empezó a compactar y se cayó una parte del muro y le pegó a una casa, pero no a la estructura”, explicó Colorado Acosta.