Los católicos no pueden serlo sólo de nombre, indicó el obispo de Orizaba, Eduardo Cervantes Merino, quien destacó que los creyentes también deben promover la paz, justicia y llevar una vida honesta.
Destacó que al no seguir a Cristo muchos de los fieles viven situaciones que sólo son consecuencia de no tener una vida como Dios manda en cuanto a los valores, comportamiento y principios. Añadió que muchos católicos expresan que viven su religión a su manera, pero eso es falta de compromiso con Cristo.
“No es que seamos malos, sino que no nos preocupamos por formarnos integralmente. Hay una expresión que se usa en algunas personas: 'yo soy católico a mi manera'; ahí se encierra sólo lo que nos conviene pero no captamos toda la riqueza de la enseñanza de Jesús”.
Apuntó que todos los fieles deben estar atentos para llevar una vida llena de Jesús y seguir los principios de paz, justicia, honestidad y guiar por el buen camino a sus familias.
“De la mano se debe abandonar el pecado, el egoísmo. Hay que sufrir una transformación”, dijo.
Cervantes Merino agregó que nadie puede presumir que conoce en su totalidad a Jesús, porque el diario caminar con él se le va experimentando como el Dios de cada circunstancia.
Finalmente, acotó que otro aspecto que debe cuidar el cristiano es alejarse de los prejuicios y procurar buscar a Dios cada día, para contribuir también a una mejor sociedad.