La pandemia impulsó el “brutal” avance tecnológico, afirman

La pandemia ha traído muchísimas cosas malas pero también una grandísima oportunidad para dar un paso adelante y definitivo desde el punto de vista tecnológico, expresó el director gerente del Consorcio Asturiano de Servicios Tecnológicos del Principado de Asturias, Ángel Luis Cabal Cifuentes.

Entrevistado en Orizaba a donde acudió para ser parte del XIII Congreso Iberoamericano de Municipalistas, comentó que la previsión que se tenía para el avance tecnológico era de 10 años de escalada pero prácticamente se ha hecho en un año de pandemia. "En términos coloquiales, la pandemia nos ha puesto las pilas y de una manera brutal".

Recordó que este consorcio asturiano es un instrumento público que está formado por el Estado del principado de Asturias y la unión de la fuerza del Estado de la comunidad autónoma con los municipios menores de 20 mil habitantes, lo que permite a estos municipios pequeños y alejados de los grandes núcleos industriales, comerciales, es decir fundamentalmente municipalidades de alta montaña y pesqueras, dispongan de los mismos recursos tecnológicos que disponen las grandes ciudades.



"Porque la idea es trabajar en la vertebración del territorio y todas las personas dentro de esta demarcación, deben de tener las mismas oportunidades para el progreso económico y para el progreso personal y profesional".

Pero dijo que la realidad en el principado de Asturias, es que carecen de la capacidad financiera y muchas veces de la cualificación profesional de sus empleados, siempre pocos, para gestionar lo público y carecen de las fortalezas para hacer la transformación real del municipio. "Por ello se pensó en un consorcio que desde lo público pudiera facilitar a los municipios en esta labor".

Dijo que uno de los retos más grandes que tienen es que todos los municipios sin importar su tamaño tengan la misma capacidad tecnológica desde el punto de vista del funcionamiento del servicio público, para que sus ciudadanos no noten la diferencia entre vivir en una gran ciudad o en un territorio como alta montaña.



Este tipo de experiencia la compartirá durante este encuentro de 300 autoridades municipales de Iberoamérica, que inició ayer por la noche.