Hay que actuar por convicción, no por dádivas: Obispo de Orizaba

El municipio de Maltrata no solamente se limita a ser un lugar de curvas y una zona de asaltos, sino que también da frutos buenos como las vocaciones de sacerdotes, indicó el obispo de la diócesis de Orizaba, Eduardo Cervantes Merino, esto tras congratularse porque la semana pasada fueron ordenados presbíteros, entre ellos un joven de ese municipio.

Añadió que en la actualidad, anunciar el bien no es fácil; a veces, en la vida familiar y en el trabajo, hay muchas dificultades.

"Pero también hay en algunas estructuras burocráticas de diferentes niveles también es dificultades anunciaron el bien, incluso en las parroquias, se nos viene la tormenta y pareciera que el mal tiene poder sobre el proyecto bueno".

Destacó que hay ocasiones donde pareciera que el mal domina o que sacude todo cuanto iba funcionando muy bien, pero se debe seguir luchando en todos los sectores de la vida para anunciar a Dios.

"De repente se da uno cuenta de que estamos en un problema y ante las tormentas que se viven en la sociedad, nos surge la pregunta: ¿dónde está Dios? o, por ejemplo, en ciertas situaciones del país donde la violencia no baja aunque nos digan que hay otros datos, preguntamos lo mismo, pero Dios está siempre presente en la tormenta".

Finalmente, pidió a todos, seminaristas, sacerdotes, laicos, religiosas, fieles y hombres de buena voluntad, hacer todo por convicción y no por dádivas.