Tras 24 horas de lucha en el quirófano, Nóriko Dallana Quezada Ruiz perdió la vida en el Hospital General de Zona 36 del IMSS luego de ser atacada con arma de fuego. La familia de la joven de 22 años, pasante de enfermería por la Universidad de Sotavento (US), confirmó el fallecimiento. La madre de Nóriko, Lisset Ruiz Granados, exigió justicia por el feminicidio de su hija y señaló que hay testigos que tienen miedo de declarar.
Manifestó a 2 sospechosos del crimen que son Gregorio Michel Domínguez y Sebastián Hernández, el primero quien la acosó por 3 años y mantuvieron una relación de noviazgo por año y medio, mientras que Sebastián tampoco ha dado la cara y no ha sido localizado, aunque las investigaciones continúan.
“Él la acosaba mucho, la amenazaba con que se iba a quitar la vida, no la dejaba en paz. Su celular se lo tenía vinculado para ver qué es lo que hacía, dónde iba, con quién iba, con quién hablaba. Amenazó a muchos (de sus) amigos y se alejaron. Le dijeron, sabes qué, no queremos problemas”, indicó.
Expresaron que uno de ellos tuvo tiempo de huir, pues a pesar de que llevaron a la policía al domicilio del sujeto, ya se había ido. Aseguró que Nóriko era una buena muchacha muy querida en el HGZ 36.
Por último agradeció el apoyo que recibieron con la donación de sangre para intentar salvarle la vida. Nóriko fue atacada a balazos este viernes poco antes de las 7 de la mañana, una de las balas se alojó en el cráneo.