Episcopado condena asesinato de sacerdote en San Cristóbal de las Casas

Luego del asesinato del padre Marcelo Pérez, de la parroquia de Cuxtitali en San Cristóbal de las Casas, la Conferencia del Episcopado Mexicano (CEM) condenó el hecho y exigió justicia, así como la garantía de seguridad para los agentes pastorales y sacerdotes.

"La CEM expresa su más enérgica condena y profundo dolor ante el brutal asesinato del padre Marcelo Pérez, sacerdote de la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, ocurrido en el barrio de Cuxtitali. Este acto de violencia, perpetrado al terminar la misa, cuando el padre salía para continuar con sus labores pastorales, no solo priva a la comunidad de un pastor dedicado, sino que también silencia una voz profética que incansablemente luchó por la paz con verdad y justicia en la región de Chiapas", dijo la CEM en un comunicado.

En el mismo comunicado, la CEM destacó que el presbítero fue un ejemplo vivo de compromiso sacerdotal con los más necesitados y vulnerables de la sociedad. "Su labor pastoral, caracterizada por su cercanía al pueblo y su apoyo constante a quienes más lo necesitaban, deja un legado de amor y servicio que perdurará en el corazón de todos aquellos a quienes tocó con su ministerio. Como Iglesia, lamentamos profundamente la pérdida de una vida consagrada al servicio de Dios y del prójimo. Este acto de violencia no solo afecta a la Diócesis de San Cristóbal de Las Casas, sino que hiere a toda la Iglesia en México y a la sociedad en su conjunto, especialmente en una región que hoy vive situaciones delicadas de violencia", señaló la CEM.

Por ello, todos los obispos del país que conforman la CEM hicieron un llamado urgente a las autoridades de todos los niveles de gobierno, tanto federal, como estatal y municipal, para que se realice una investigación exhaustiva y transparente que conduzca al esclarecimiento de este crimen y se haga justicia en el caso del padre Marcelo Pérez.

Asimismo, instaron a que se implementen medidas efectivas para garantizar la seguridad de los sacerdotes y agentes pastorales que, como él, dedican su vida al servicio de los más necesitados, especialmente en zonas de alto riesgo. También solicitaron redoblar los esfuerzos para combatir la violencia y la impunidad que afectan a la región de Chiapas y al país en general.

Finalmente, pidieron a la comunidad de fieles y a toda la sociedad mexicana unirse en oración por el eterno descanso del padre Marcelo Pérez, por el consuelo de su familia, amigos y feligreses, y por la paz en Chiapas y en todo México.

"Que el sacrificio del padre Marcelo Pérez no sea en vano, sino que nos impulse a todos a trabajar con mayor eficacia por la construcción de una sociedad más justa, pacífica y fraterna en Chiapas y en todo el país, fiel al mensaje del Evangelio que él predicó con su vida y su muerte", concluyó la CEM.