El homenaje que se le rinde a Vicente Leñero inició en Bellas Artes con aplausos de los asistentes, quienes acudieron para recordar al escritor y periodista, fallecido ayer a los 81 años.
Fue así, en un ambiente de respeto y admiración, como el público recibió las cenizas del autor de una vasta y diversa obra, entre novela, cuento, ensayo, guiones para cine y teatro, entre otros ámbitos.
El poeta Eduardo Lizalde realizó la primera guardia de honor. Mientras el Cuarteto de Cuerdas Coyoacán intepreta música de Händel, Mozart, Pachelbel, Schubert.
Diversas personalidades, como el presidente de CONACULTA, Rafael Tovar y de Teresa y el escritor Adolfo Castañón acompañan a la familia del escritor.
Congruencia y vocación
El titular de CONACULTA reconoció la congruencia que dominó tanto la vida como la obra del escritor Vicente Leñero, a quien se le rinde homenaje en el Palacio de Bellas Artes.
Dirigiéndose a su familia y amigos, el funcionario recordó la fortuna de que Leñero dejara la Ingeniería y se decidiera por su verdadera vocación, en las letras, "a pesar de ser una vocación compleja".
"Es un ejemplo de disciplina y exigencia personal", abundó el funcionario. Su obra, mencionó retomando las palabras de José de la Colina: "abre una nueva ruta en la literatura mexicana" pues "la experimentación y la constancia de su escritura son una invitación a leerlo y mantenerlo vigente entre las nuevas generaciones".