La venta de libros ha disminuido hasta 15% en comparación al año pasado, así lo afirmó Eduardo Montecho Balderas, quien forma parte de los libreros del pasaje Enríquez de la ciudad de Xalapa.
Esto se debe en gran parte al notable aumento en el costo de los ejemplares, que este año han presentado un incremento de hasta el 20%. El aumento es más notable en los libros de importación, ya que varía en consecuencia al precio del dólar, Montecho ejemplificó este caso con el libro que lleva por título El Secreto, costaba 330 pesos y hoy se vende en $ 395.
Ante este aumento, Montecho afirmó: “Hay gente que declara abiertamente que de leer una novela que cuesta 200 pesos mejor compra lo necesario para la despensa”.
Sin embargo, reiteró que no es motivo suficiente ya que existen libros desde un peso, 5, 10, 20 pesos, existen también la biblioteca pública, el libro prestado, el libro de uso; “no existe pretexto para no leer”.
En la ciudad de Xalapa, según la experiencia de Montecho, lo más buscado es la lectura clásica ya que la encargan los maestros del nivel bachillerato. De igual manera los temas como: política, de actualidad, medicina alternativa, los libros de respuestas, tienen gran demanda ya que “la gente se encuentra en búsqueda de respuestas a sus interrogantes”, afirmó.
Los temas como: metafísica, gimnasia cerebral, esoterismo y las lecturas alternativas también tienen demanda pero éstas tienen un público definido.
La novela rosa es la que podría ubicarse de las que menos se venden, ya que es cara y aporta muy poco, una novela rosa cuesta alrededor de 450 pesos.
Dentro de los autores más leídos se encuentran: Juan Rulfo, Octavio Paz, Carlos Fuentes, García Márquez, Saramago, Benedetti, Sabines, Coelho.
Los libros de Eduardo Galeano han sido bien recibidos por el público xalapeño y aumenta su demanda, esto debido a las recientes visitas y a la entrega del Doctorado Honoris Causa de la UV; “el problema con el que se encuentran los lectores, es que en la ciudad de Xalapa son pocas las librerías que distribuyen sus obras, aunado a que es caro y las políticas de distribución no son abiertas para todos los libreros”, reiteró Montecho.
Con respecto al perfil del comprador de libros, Eduardo Montecho afirmó que “las apariencias engañan, no existe perfil del comprador, puedes ver a una persona vestida pulcramente con ropa de marca… y no compra, en cambio gente que tiene apariencia sencilla invierte en un libro, por lo que es difícil detectar, a simple vista, a un comprador de libros”.
Aunque agregó que durante la conversación es muy fácil detectar quien es lector, “la gente que es lectora de inmediato se nota, puedes entablar un dialogo con ella y de inmediato aporta datos conclusiones o apreciaciones”.
Montecho reiteró que dentro de las personas que atienden los puestos ubicados en el pasaje Enríquez existe gente con más de 20 años de experiencia y que más que despachadores son “libreros”.
Aprovechó la oportunidad para invitar a la ciudadanía xalapeña a que asista este domingo 26 a partir de las 10 de la mañana a donar los libros que no ocupen o que ya hayan leído. Estos libros se recaudaran con la intención de ser donados para la formación de la biblioteca del municipio del Chico.
En caso de que la respuesta de la población sea mayor a la esperada, parte de los libros recaudados se entregaran al acilo Sayago y a la dirección de rehabilitación social para las personas que se encuentran en las prisiones, ya que —aseguró— “la lectura reivindica”.