Ahora que desaparecieron a los organismos autónomos, como el INAI, CRE y COFECE, porque la 4T argumenta que son ineficientes, corruptos o duplican funciones, podría hacerse otra revisión y extender la limpia.

En Veracruz -replicando esta visión de Morena- podríamos ahorrar unos buenos millones de pesos, solo es cuestión de ver lo que aportan algunas áreas gubernamentales y si es necesaria su existencia.

Empecemos por la Legislatura, que este año ejerció alrededor de 801 millones de pesos. En los últimos seis años, igual que antes, las principales iniciativas de ley y los presupuestos fueron aprobados como se los enviaron desde el Poder Ejecutivo.


Además hubo incontables fallas con sus iniciativas y decisiones que fueron echadas abajo en otras instancias. Varios magistrados corridos tuvieron que ser reinstalados, desaparecieron poderes en Mixtla de Altamirano y tuvieron que regresar a los ediles, la Ley de Comunicación Social se las rebotaron y un largo etcétera de cuestiones similares, independientemente de las fallas al vigilar a los alcaldes.

En las comparecencias de secretarios de despacho para la aplastante mayoría de diputados de Morena todo está bien y les aplauden a los funcionarios, como era antes. Lo que hacen 50 legisladores lo pueden hacer 15 o 10, de todas formas aprobarán de la misma forma las iniciativas de ley y aplaudirán igual.

¿Cómo para qué está ese Poder si sigue siendo, como en el pasado priista, un apéndice del Ejecutivo?


Sigamos con la Secretaría de Infraestructura y Obras Públicas (SIOP), que manejó mil 932 millones. Las carreteras nuevas ya están en mal estado y las que estaban mal ahora están peor, entonces ¿como para qué su existencia? Mejor reducirla a su mínima expresión y que habitantes de cada municipio y transportistas se organicen para dar mantenimiento y abrir nuevas carreteras y puentes.

Seguridad Pública dispuso de poco más de 6 mil millones de pesos y si por un lado el titular de la SSP, Cuauhtémoc Zúñiga, habla de que todo ha mejorado al haber menos secuestros, feminicidios y otras acciones criminales, la realidad es que la inseguridad es mayor y que los asesinatos, extorsiones y asaltos continúan con altos índices. ¿Si el presupuesto aumenta pero los resultados son malos, como para qué darle tanto a esa área?

También está lo que sucede en Tránsito. Las ciudades son un caos por el tráfico vehicular y todos los días, por todas las ciudades y carreteras estatales, circulan camiones de pasaje y taxis que son unas buenas máquinas... para contaminar y poner en riesgo a los pasajeros por su pésimo estado. ¿Qué hace Tránsito para terminar con esos problemas?, nada, entonces ¿no sería conveniente irle reduciendo significativamente su presupuesto?


Con los atracos de las grúas y lo que sacan en las revistas vehiculares podría salir el presupuesto de Tránsito con mucho menos personal.

En el Poder Judicial, que dispuso de 2 mil 168 millones, si corrieron a varias magistradas con todo y tiliches e hicieron añicos lo que tenía de prestigio ese Poder, pues que lo reduzcan al mínimo y se ahorre otra buena cantidad.

A la Fiscalía, que le dieron mil 779 millones, si la Fiscala no es autónoma, pues que dejen de aparentar y que empiecen por ahorrar el sueldo del titular y que bajen las partidas pues con suficiente dinero de todas formas los resultados son malos. Para perseguir a los rivales políticos no se necesitan tantos recursos.


El OPLE, el organismo que organiza las elecciones y este año gastó mil 250 millones de pesos, pues que el próximo año le reduzcan el presupuesto tomando en cuenta que desde ahora se canta que Morena ganará unas 200 alcaldías dejando a la oposición unas cuantas posiciones. Para eso, que la organización regrese a la Secretaría de Gobierno y no se gaste tanto.

Y la Contraloría General del Estado que de plano sea borrada, es innecesaria, ya ve estimado lector que con el gobernador Cuitláhuac García la corrupción se redujo a cero y que la misión de gobierno está cumplida. Con tal grado de honestidad ¡para qué la Contraloría!