Veracruz es una de las 10 entidades federativas que se encuentra por arriba de la media nacional con relación a la población con mayor magnitud de inseguridad alimentaria.
Mientras que la media nacional es del 55.5%, de la cual, el 8.6% corresponde a severa, el 14.1% a moderada y el 32.8% a leve; Veracruz registra el 70.7% de su población con mayor magnitud de inseguridad alimentaria y de ese porcentaje, 14.4% corresponde a severa, 19% a moderada y 37.4% a leve.
Lo anterior, debido a que la población carece de ingresos para adquirir una alimentación suficiente, lo que ocasiona graves problemas de nutrición como baja talla, diabetes, sobrepeso y mala calidad de la dieta, toda vez que 8 de cada 10 hogares de la muestra tomada presentan pobreza, siendo las áreas rurales las de mayor prevalencia comparados con los de las áreas urbanas.
Aunado a lo anterior, la baja talla (16.6%), bajo peso (3.8%) y emaciación (1.3%) son indicadores de desnutrición crónica y actualmente siguen siendo un problema de salud pública.
Dichos indicadores muestran los efectos adversos que se ven reflejados en la morbilidad, mortalidad, en el desarrollo psicomotor y en el desempeño intelectual y físico, lo que se traduce en desventajas de por vida en la evolución de capacidades.
Otro indicador importante es el sobrepeso y la obesidad en la población veracruzana, el cual presenta las siguientes prevalencias: 34 mil 67 niños menores de cinco años; 206 mil 823 niñas y niños en edad escolar entre 5 y 11 años; 574 mil 80 adolescentes entre 12 y 19 años; y 3 millones 993 mil 93 adultos.
Ante la elevada proporción de hogares que se reportaron con inseguridad alimentaria, es prioridad para las políticas públicas diseñar estrategias o programas que hagan efectivo el cumplimiento del derecho a la alimentación.
Activan desayunos escolares
Ante ese panorama y pese a que las clases presenciales se han reactivado de manera parcial en algunos municipios de Veracruz, Georgina Beatriz Victory Fernández, encargada de Despacho de la Dirección General del Sistema para el Desarrollo Integral de la Familia (DIF), emitió las Reglas de Operación del Programa Desayunos Escolares en sus Modalidades: Fríos y Calientes 2021.
El Programa tiene una población potencial de aproximadamente 1 millón 479 mil 528 niñas, niños y adolescentes inscritos en 20 mil 585 planteles oficiales del Sistema Educativo Estatal.
Pero la población prioritaria es de aproximadamente 547 mil 79 niñas, niños y adolescentes en condiciones de vulnerabilidad, que asisten a 12 mil 624 planteles oficiales, ubicados en municipios, localidades o área geoestadística básica
rural (AGEB), urbanas o zonas indígenas de alto o muy alto grado de marginación, priorizando aquellas con elevado porcentaje de malnutrición o con una prevalencia mayor o igual al 15% de estudiantes con desnutrición, independientemente del grado de marginación.
El apoyo de desayunos fríos va enfocado a las escuelas de los niveles preescolar y primaria con cobertura en 211 municipios de Veracruz (el municipio de Landero y Coss se beneficia únicamente con Desayunos Escolares en su Modalidad Calientes).
El desayuno debe ser balanceado y por lo menos cubrir el 25% de los requerimientos nutricionales que debe consumir una niña o un niño durante el día.
La integración de esta ración alimentaria es la siguiente: bebida: 250 mililitros de leche líquida descremada y/o agua natural a libre demanda; un plato fuerte que incluya cereal integral, verduras, leguminosas y/o alimentos de origen animal; y fruta fresca de temporada, de preferencia de la región.
La dotación consta de 5 menús cíclicos, los cuales se repartirán de lunes a viernes (a excepción de los días de consejo técnico o días festivos), serán debidamente balanceados con el fin de cubrir como mínimo el 25% de los requerimientos nutricionales que debe consumir una niña o niño durante el día.
La operatividad del programa Desayunos Escolares en su Modalidad Fríos se basa en aprovechar la infraestructura de los planteles educativos ubicados en las zonas indígenas, rurales y urbanas clasificadas con muy alto grado de marginación, con la finalidad de satisfacer la necesidad básica de alimentación, considerando que dicho desayuno es tipo refrigerio, fácil de transportar y consumir dentro del salón de clases.