En las calles de Veracruz, sitios turísticos y mercados, el "viejo" ya pide su limosna. Esta tradición veracruzana, en la que se caracterizan de un viejito y salen a bailar, se mantiene en el puerto.
Aunque se señala que no es como en otros años, hay quienes se colocan una peluca blanca y usan bastón para recorrer las calles despidiendo al año viejo. “Que esta tradición siga adelante. Se ha perdido y ya casi todas las personas tienen vergüenza de salir. Es una tradición del heroico puerto de Veracruz, hay que mantenerla”, dijo Arturo.
El objetivo, además de conservar esta tradición, es que la gente comparta la alegría y se divierta con el espectáculo de ver al viejo pidiendo su limosna para el año nuevo. “La gente se ve alegre, todos tienen armonía por el año nuevo, y muchos tienen problemas que se olvidan con el viejo. Me tuve que preparar un día antes con la ropa y todo”, agregó Juan.
La gente ha sido bondadosa con los viejos; señalan que la limosna ha sido buena y, aunque no lo hacen por el dinero, la retribución les ayudará a arrancar el 2025 contentos. Ya sea el viejo caracterizado, el muñeco que se va a quemar o la piñata, afirman que lo importante es no olvidar la tradición de cada 31 de diciembre.