Xalapa rinde culto al automóvil; sus calles no son para peatones sino para vehículos

En Xalapa se le rinde culto al automóvil, al grado que las calles ya no son para el peatón sino para los vehículos, desniveles para entradas de cocheras, automóviles estacionados sobre las banquetas, aunado a casetas telefónicas, calles resbalosas, entre otros obstáculos convierten a las calles de Xalapa en toda una aventura para andar a pie.

“A su majestad el auto le hemos concedido el privilegio de atravesar el espacio de los peatones para entrar a la cochera de los autos y las rampas de éstos ha inhabilitado las banquetas, hay que caminar de manera horizontal e inclinada”, externó Hugo Fernando Vergara León, presidente del Colegio de Arquitectos en el estado de Veracruz-Xalapa.

Refirió que esta situación se fue dando poco a poco, en un momento dado la autoridad se vio rebasada, la construcción de diversas rampas en las calles o escalonamiento no ha sido responsabilidad de la autoridad sino de todos que lo hicimos y permitimos.



Indicó que en su origen las ciudades no consideraban la participación del auto pues no los había.

La gente se trasladaba a pie y en carruajes, las mercancías se trasladaban en vehículos tirados por un caballo, las ciudades eran pequeñas, no había problema de transportación.

Con la aparición del coche el peatón se fue quedando a la orilla, tuvo que abrir paso a esa máquina que fue amenazante, se fue reduciendo el espacio del peatón; al principio de un carril y el ancho de las banquetas actualmente es mínimo.



Y es que si se toma en cuenta que el paso para el peatón es compartido con postes, señalización y casetas telefónicas, entre otros, además de vendedores ambulantes o coches que se suben a la banqueta, definitivamente el espacio del peatón ha sido dañado.

“Las mujeres sufren que la superficie no es cómoda, se ha vuelto intransitable, hay muchas partes de la ciudad con empedrado, adoquines, superficie resbalosa y no son superficies seguras sobre todo cuando las calles están mojadas, el problema de salir a la calle se vuelve una aventura”.

El Arquitecto, señaló que el espacio para el peatón se fue reduciendo y quedó hecho nada.



“Hoy tenemos que ir tomando conscientemente y en una forma participativa todos el que vayamos generando espacios de tránsito seguros para todos, porque todos caminamos y lo tenemos que hacer de manera segura en banquetas y cruces adecuados, buscando tener la menor cantidad de obstáculos, para que niños, la gente mayor, la gente con alguna discapacidad temporal o permanente pueda hacerlo de manera segura”.

Que mujeres con zapatillas puedan caminar con seguridad; “aquí todos tenemos que cooperar, la ejecución de la obra pública, la rehabilitación tendrá que ir considerando el espacio seguro para transitar cuando caminamos”, opinó.