Pese a calor infernal, CFE cortó luz a escuela… y SEV tuvo la culpa

La escuela primaria “Salvador Díaz Mirón”, ubicada en el puerto de Veracruz, se encuentra sin energía eléctrica y sin clases debido al corte de suministro por parte de la Comisión Federal de Electricidad (CFE) desde el pasado viernes 19 de abril.

Los alumnos no asisten a clases presenciales desde el 22 de abril debido a que la falta de electricidad también dejó las instalaciones sin agua potable, pues no tienen energía para prender la bomba que los abastece.

Al respecto, la Sociedad de Padres de Familia detalló que el motivo de este corte se relaciona con un conflicto de pago entre la Secretaría de Educación de Veracruz (SEV) y la CFE, que reclama un adeudo por un monto de 94 mil 852 pesos.



Este problema de deuda se remonta al mes de noviembre del año pasado, cuando la escuela reportó problemas en el suministro eléctrico. La Dirección descubrió entonces que la SEV tenía un adeudo pendiente que aún no ha sido saldado a la fecha.

“Con estos calores es casi imposible para nuestros niños que tomen sus clases de manera adecuada, los niños no tienen clases pues no cuentan con los servicios más importantes para su higiene”, expusieron los padres de familia.

La Directora de la escuela se comunicó con Pablo Rivera, de los Servicios Generales de la SEV, quien informó que la institución educativa había solicitado un reajuste en la estimación de consumo. Sin embargo, la CFE no ha respondido a esta petición.



El viernes 19 de abril, personal de la CFE acudió a la escuela con la orden de cortar el suministro eléctrico. A pesar de los intentos de negociación la CFE insistió en el corte del servicio, indicando que solo se cancelaría si se realizaba una transferencia de pago en ese momento.

Este corte de energía ha afectado gravemente el funcionamiento de la escuela, especialmente en medio del intenso calor que se experimenta en la región. Los estudiantes no han podido asistir a clases presenciales desde hace una semana, ya que la falta de electricidad también afecta el suministro de agua potable, impidiendo el adecuado mantenimiento de las instalaciones y el uso de los servicios sanitarios.

Ante esta situación, la escuela hizo un llamado urgente a las autoridades correspondientes para que se resuelva este conflicto de pago y se restablezca el suministro eléctrico, garantizando así el derecho de los niños a recibir una educación adecuada en un entorno seguro y saludable.