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Sección: Estado de Veracruz
Arquitectura xalapeña, modesta pero importante, puede ser comparada internacionalmente
En la medida que las personas reconozcan su patrimonio, será más difícil que sea destruido: Fernando Winfield
Natalia Rebolledo Xalapa, Ver. 28/04/2016
alcalorpolitico.com
La tarde de este jueves, en la FILU se presentó el libro: "México-Veracruz, miradas desde adentro y hacia fuera", interpretaciones regionales y nacionales del movimiento moderno, por Fernando Noel Winfield Reyes, con las participaciones de José Antonio Hernanz del Moral, Carlos Caballero Roquet y Gustavo Bureau Roquet como moderador, el cual detalla la historia de la arquitectura moderna, la cual muchas veces pierde interés por la cercanía de su creación.
“La arquitectura, generalmente se enfoca en el pasado para analizar y evaluar el proceso de creación”, aseguró Gustavo Bureau Roquet, exdirector de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Veracruzana, por lo que un grupo de investigadores se dio a la tarea de crear un organismo para documentar edificios del movimiento moderno: el proyecto DOCOMOMO.
A partir de su creación se pudo documentar e investigar el patrimonio arquitectónico del Caribe y Golfo de México, entre ellos Veracruz; Fernando Winfield aseguró que el patrimonio histórico de Xalapa puede ser comparado con arquitectura internacional, “modesto pero importante, de vanguardia internacional”, dijo.
Este libro hace una recopilación de esas edificaciones contemporáneas que se encuentran en el paisaje xalapeño dándole un sentido internacional, entre ellas y una de las más reconocidas y estudiadas: el Estadio Xalapeño, construido bajo la dirección del ingeniero Modesto C. Rolland.
Hablaron de Alberto Mendoza, pionero de la arquitectura moderna en Xalapa y Enrique Segarra, en Veracruz, cuyas obras se mencionan en la publicación.
Los investigadores apuntaron la importancia del urbanismo en la arquitectura, el cual de manera ideal, debería tener el voto del colectivo social para las modificaciones de edificios, no sólo de las personas con poder político y económico.
“En la medida que las personas reconozcan su patrimonio, será más difícil que sea destruido”, aseguró Fernando Winfield.
“La arquitectura es el escenario de la vida, se trata de hacer ver a las personas que el patrimonio es de todos, por eso cuando una persona escupe en la calle o tira un chicle y dice, ‘esto no es mío’, es un error, la población debe entender que sí lo es para que puedan cuidarlo como cuidan su casa”, dijo el investigador Carlos Caballero Lazzeri.
“Esta publicación trata de rescatar la importancia del patrimonio moderno, que no tiene el brillo del histórico, pero es la historia del periodo actual” aseguró José Antonio Hernanz del Moral, director general de Desarrollo Académico e Innovación Educativa, en representación de la rectora Sara Ladrón de Guevara.
Habló sobre los enemigos del modernismo: el nacionalismo, la mercantilización y el esnobismo.
“La arquitectura se piensa como desafío social y cultural, tiene como finalidad dar forma al espacio donde se construye la vida humana”, concluyó José Antonio Hernanz.
“La arquitectura, generalmente se enfoca en el pasado para analizar y evaluar el proceso de creación”, aseguró Gustavo Bureau Roquet, exdirector de la Facultad de Arquitectura de la Universidad Veracruzana, por lo que un grupo de investigadores se dio a la tarea de crear un organismo para documentar edificios del movimiento moderno: el proyecto DOCOMOMO.
A partir de su creación se pudo documentar e investigar el patrimonio arquitectónico del Caribe y Golfo de México, entre ellos Veracruz; Fernando Winfield aseguró que el patrimonio histórico de Xalapa puede ser comparado con arquitectura internacional, “modesto pero importante, de vanguardia internacional”, dijo.
Este libro hace una recopilación de esas edificaciones contemporáneas que se encuentran en el paisaje xalapeño dándole un sentido internacional, entre ellas y una de las más reconocidas y estudiadas: el Estadio Xalapeño, construido bajo la dirección del ingeniero Modesto C. Rolland.
Hablaron de Alberto Mendoza, pionero de la arquitectura moderna en Xalapa y Enrique Segarra, en Veracruz, cuyas obras se mencionan en la publicación.
Los investigadores apuntaron la importancia del urbanismo en la arquitectura, el cual de manera ideal, debería tener el voto del colectivo social para las modificaciones de edificios, no sólo de las personas con poder político y económico.
“En la medida que las personas reconozcan su patrimonio, será más difícil que sea destruido”, aseguró Fernando Winfield.
“La arquitectura es el escenario de la vida, se trata de hacer ver a las personas que el patrimonio es de todos, por eso cuando una persona escupe en la calle o tira un chicle y dice, ‘esto no es mío’, es un error, la población debe entender que sí lo es para que puedan cuidarlo como cuidan su casa”, dijo el investigador Carlos Caballero Lazzeri.
“Esta publicación trata de rescatar la importancia del patrimonio moderno, que no tiene el brillo del histórico, pero es la historia del periodo actual” aseguró José Antonio Hernanz del Moral, director general de Desarrollo Académico e Innovación Educativa, en representación de la rectora Sara Ladrón de Guevara.
Habló sobre los enemigos del modernismo: el nacionalismo, la mercantilización y el esnobismo.
“La arquitectura se piensa como desafío social y cultural, tiene como finalidad dar forma al espacio donde se construye la vida humana”, concluyó José Antonio Hernanz.
