17 de noviembre de 2014
alcalorpolitico.com
El debate sobre si fue o no displicencia del presidente, Enrique Peña Nieto, ausentarse de México en el momento más álgido de las investigaciones por la desaparición de los 43 normalistas, el aumento de actos violentos alrededor de este hecho, la incursión de la policía en CU de la UNAM y la advertencia de que “…el Gobierno federal agotará todas las posibilidades de diálogo frente a los incidentes violentos antes de usar la fuerza para restablecer el orden” ponen las cosas bastante calientes en el país.
La tensión sube de tono porque las acciones de los manifestantes se han tornado violentas atentando ya contra la civilidad, sin duda, el reclamo de justicia es apoyado por todos los ciudadanos que sufren el flagelo de la inseguridad, pero, la violencia con características delincuenciales no es aceptada por ningún grupo social porque representa una provocación para dar oportunidad al estado de ejercer actos represivos contra la sociedad.
Definitivamente, el Gobierno, está facultado para aplicar la fuerza pública para mantener el orden y ejercer todas las potestades que la ley prevé para mantener el estado de derecho.
Ante este planteamiento queremos entender que la advertencia presidencial, del uso de la fuerza pública, está enfocada directamente contra los grupos de manifestantes que ejerzan actos violentos y delincuenciales.
Por ello, debemos analizar profundamente las palabras del Presidente Peña Nieto cuando, dice, que exhorta a la sociedad a actuar con civilidad, que privilegiará el diálogo antes de recurrir a la fuerza pública para restablecer el orden.
La sociedad en este momento ha aprovechado el momento significativo de las protestas, por la desaparición de los 43 normalistas, para hacer visible el descontento por la impunidad y desatención que tiene el crecimiento, por ejemplo, del crimen en todas sus modalidades, la complicidad de funcionarios con delincuentes, el trasiego de influencias nocivas para el erario, la corrupción que prevalece en todos los actos de gobierno y la nueva fragmentación de la clase política y las clases sociales, es decir los que tienen mucho y están en el gobierno y los que no tienen casi nada y sobreviven con lo que pueden, pero reprueban la violencia.
Entonces a esos a los que se quejan por la corrupción, impunidad, inseguridad, falta de condiciones para vivir y trabajar en paz que se han subido en la protesta de Ayotzinapa para ser escuchados, ya fueron advertidos de que las protestas están llegando a su fin o sea o se apaciguan o se aguantan.
Que según el informe de, Murillo Karam, el caso está resuelto hay tres detenidos confesos, reconstrucción de hechos, al alcalde de Iguala en la cárcel, su mujer arraigada, un gobernador con licencia, que qué más quieren, pues nada, sólo que aparezcan los 43 muchachos para sentir que verdaderamente se hizo justicia y la garantía de que en este país se puede vivir en paz.
Mientras eso sucede el Gobierno Federal ya advirtió que ante los actos violentos visibles se usará la fuerza.
Eso esta muy bien, pero la sociedad mexicana en su conjunto exige que, con esa fortaleza conque el Presidente Peña Nieto condenó la violencia y el vandalismo al hacer su arribo a la ciudad de México luego de su internacional viaje, así actúe contra las acciones invisibles de la impunidad conque la clase política actual gobierna este país, así con esa fortaleza persiga a los criminales que han puesto a México en la peor crisis política de los últimos años.
En fin, creo que todos nos sentimos aludidos con las advertencias ojalá que todo se resuelva platicando, pero hay acciones que definitivamente necesitan utilizar la fuerza pública federal que considero no es contra la sociedad civil, sino contra los delincuentes, que ante la ley siguen siendo invisibles.
Suburbio 1
El Gobierno del Estado, demostró que, cuando el dinero se usa y se usa bien, genera grandes satisfacciones aunque siempre habrá “ganones” que se ponen el sombrero ajeno, felicidades por la gran inauguración de los Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe que también están dando satisfacciones a nuestro país con el medallero a favor.
[email protected]
La tensión sube de tono porque las acciones de los manifestantes se han tornado violentas atentando ya contra la civilidad, sin duda, el reclamo de justicia es apoyado por todos los ciudadanos que sufren el flagelo de la inseguridad, pero, la violencia con características delincuenciales no es aceptada por ningún grupo social porque representa una provocación para dar oportunidad al estado de ejercer actos represivos contra la sociedad.
Definitivamente, el Gobierno, está facultado para aplicar la fuerza pública para mantener el orden y ejercer todas las potestades que la ley prevé para mantener el estado de derecho.
Ante este planteamiento queremos entender que la advertencia presidencial, del uso de la fuerza pública, está enfocada directamente contra los grupos de manifestantes que ejerzan actos violentos y delincuenciales.
Por ello, debemos analizar profundamente las palabras del Presidente Peña Nieto cuando, dice, que exhorta a la sociedad a actuar con civilidad, que privilegiará el diálogo antes de recurrir a la fuerza pública para restablecer el orden.
La sociedad en este momento ha aprovechado el momento significativo de las protestas, por la desaparición de los 43 normalistas, para hacer visible el descontento por la impunidad y desatención que tiene el crecimiento, por ejemplo, del crimen en todas sus modalidades, la complicidad de funcionarios con delincuentes, el trasiego de influencias nocivas para el erario, la corrupción que prevalece en todos los actos de gobierno y la nueva fragmentación de la clase política y las clases sociales, es decir los que tienen mucho y están en el gobierno y los que no tienen casi nada y sobreviven con lo que pueden, pero reprueban la violencia.
Entonces a esos a los que se quejan por la corrupción, impunidad, inseguridad, falta de condiciones para vivir y trabajar en paz que se han subido en la protesta de Ayotzinapa para ser escuchados, ya fueron advertidos de que las protestas están llegando a su fin o sea o se apaciguan o se aguantan.
Que según el informe de, Murillo Karam, el caso está resuelto hay tres detenidos confesos, reconstrucción de hechos, al alcalde de Iguala en la cárcel, su mujer arraigada, un gobernador con licencia, que qué más quieren, pues nada, sólo que aparezcan los 43 muchachos para sentir que verdaderamente se hizo justicia y la garantía de que en este país se puede vivir en paz.
Mientras eso sucede el Gobierno Federal ya advirtió que ante los actos violentos visibles se usará la fuerza.
Eso esta muy bien, pero la sociedad mexicana en su conjunto exige que, con esa fortaleza conque el Presidente Peña Nieto condenó la violencia y el vandalismo al hacer su arribo a la ciudad de México luego de su internacional viaje, así actúe contra las acciones invisibles de la impunidad conque la clase política actual gobierna este país, así con esa fortaleza persiga a los criminales que han puesto a México en la peor crisis política de los últimos años.
En fin, creo que todos nos sentimos aludidos con las advertencias ojalá que todo se resuelva platicando, pero hay acciones que definitivamente necesitan utilizar la fuerza pública federal que considero no es contra la sociedad civil, sino contra los delincuentes, que ante la ley siguen siendo invisibles.
Suburbio 1
El Gobierno del Estado, demostró que, cuando el dinero se usa y se usa bien, genera grandes satisfacciones aunque siempre habrá “ganones” que se ponen el sombrero ajeno, felicidades por la gran inauguración de los Juegos Deportivos Centroamericanos y del Caribe que también están dando satisfacciones a nuestro país con el medallero a favor.
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