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Columnas y artículos de opinión
Cabos Sueltos
Silvia Sigüenza
10 de octubre de 2016
alcalorpolitico.com
Entre el Ser y el Parecer, la diferencia es abismal. Hoy lo importante resulta ser el parecer.
 
Y así resulta que de muchos años atrás vivimos en un permanente carnaval acompañado de la gran y al parecer interminable feria de las vanidades. Forma y manera de vivir en sociedad, que por supuesto incluye la forma de vida al interior de las familias, de las instituciones de los tres niveles de gobierno y lamentablemente de las instituciones de educación en todos los grados desde el kínder, primaria, secundaria, bachillerato , educación universitaria etc, etc…
 
Resultado. Una sociedad que habita, comparte y asume la falsedad, la mentira, el engaño, la absoluta carencia de respeto por la familia, escuela, prójimo, nuestro entorno, la naturaleza, y por supuesto que los gobiernos en todos sus niveles, con sus miles de dependencias son quienes llevan de tiempo atrás, la delantera.
 

Por supuesto que no descarto los casos de excepción, que para conservar un poco de esperanza, mantienen la educación, el respeto a la familia, a las instituciones y al prójimo.
 
Estamos a escasas semanas de iniciar un nuevo gobierno estatal; y dadas las terribles condiciones de miseria económica, inseguridad, y absoluta farsa de las instituciones gubernamentales y educativas; los ciudadanos del estado de Veracruz clamamos por un urgente cambio. Necesidad sentida y urgente; sin embargo las manifestaciones de presión por parte de los responsables del desorden estatal, han sido de cinismo, valentonadas y demás actitudes de absoluta falta de conocimiento político, honorabilidad como personas y como funcionarios públicos. Esto que es apenas un asomo de lo que todos los veracruzanos hemos padecido desde la llegada de Fidel Herrera Beltrán y que asumió tintes de horror para los ciudadanos con el sucesor, Javier Duarte de Ochoa; ha dado como resultado lógico por lo demás, que entre los ciudadanos el cambio de gobierno y de partido al que pertenece quien gobernará el Estado a partir del uno de diciembre del año que corre, exista un exagerado optimismo, es comprensible que esto suceda; el Gobernador electo Miguel Ángel Yunes Linares, que llega en medio de la tempestad agónica de quienes han hecho de Veracruz un muladar y un campo de guerra entre gobernantes y ciudadanos, con un acoso señaladamente doloso a los medios informativos y trabajadores de los mismos; con un saldo de vidas cegadas en este remolino de violencia e intolerancia.
 
Vale la pena recordar, creo que es nuestra obligación señalar que el gobernador Yunes Linares, ejercerá el mandato por un periodo de dos años. A este corto periodo se suma un periodo electoral que no será nada tranquilo, las elecciones municipales. Las arcas no sólo vacías sino con fuertes deudas que no pagará en el tiempo que queda a este gobierno pero que por ser deudas oficiales del gobierno a los ciudadanos deberá pagar el gobierno entrante. Porque si bien todos tenemos meridianamente claro el saqueo cometido por Duarte y compañía, todas las trapacerías y robos se hicieron desde la institución Gobierno del Estado.
 

Y me parce que no es tiempo de seguir abriendo frentes, es tiempo de saber que nos espera un inicio difícil, un gobierno que si bien cuenta con un conocedor de la política y del estado en que se encuentra el Estado; el tiempo será corto, el presupuesto muy recortado y las necesidades a cubrir muchísimas.
 
Creo que es tiempo de reflexión, de reintegración familiar y social, de reconciliación entre los diversos estratos que integramos la sociedad y apaciguar un tanto los ánimos.