8 de febrero de 2016
alcalorpolitico.com
El Gobierno del Estado insiste en que no debe nada a la UV y la rectora, Sara Ladrón de Guevara, le vuelve asestar otro golpe mediático a la administración duartista, en el cual corrige y exhibe el desconocimiento de los compromisos y obligaciones del estado con la UV, al Secretario de Gobierno, Flavino Ríos Alvarado.
Primero fue, en conferencia de prensa, en la cual la Señora Rectora, expresa la postura de la UV ante el no pago del Gobierno a la máxima casa de estudios; manifiesta la institucionalidad de la Universidad Veracruzana, que no la sumisión al poder ejecutivo y dentro de esa institucionalidad, por los cauces legales, requiere el pago a través de denuncias ante la Fiscalía del Estado y la PGR, para que, el gobierno de Veracruz, cumpla con el pago de los subsidios obligados para el funcionamiento de la UV.
Luego en una carta firmada, por Flavino Ríos Alvarado, sus asesores o él mismo pretende cubrir la verdad con una errónea cortina de humo donde, hasta con datos equivocados, pretende cobrar adeudos por falta de pago a pensionados y cargas fiscales de las cuales la Universidad está exenta.
De la misma forma el abogado general de la UV, vuelve a explicar detalladamente las inconsistencias de la misiva del Secretario de Gobierno, que pretendió con esa carta seguir justificando la ineficiencia e incumplimiento de los compromisos pactados con su jefe, el gobernador del estado, y el compromiso contraído por la Secretaría de Finanzas que había instrumentado un calendario para los pagos que nunca llegó.
En ambos casos, el Secretario de Gobierno, pensó que con esos acuerdos publicados y referenciados con los links respectivos en la contestación del Abogado general de la UV, sería suficiente para dar largas y entretener a la sociedad y a la misma Universidad Veracruzana, de que el pago ya estaba procesándose ¿para cuándo? quién sabe, sólo era un distractor para dilatar los compromisos.
Lo que nunca pensaron los representantes del Gobierno es que, la premura y urgencia de la UV por saldar pasivos con proveedores, prestadores de servicios y los propios gastos para pago de nómina y operación de la UV, obligó a las autoridades universitarias a la última opción para requerir el pago por la vía legal un par de denuncias para ver si ahora el estado si paga.
El diálogo tan presumido por el Gobierno, el cual ofrece la firma de una minuta sólo para ganar tiempo y echarse adentro de los impenetrables “pilares de oro y plata” para aplicar las leyes del cansancio, aburrimiento en contra de los acreedores.
Pero en esta ocasión el acreedor, es la Universidad Veracruzana, el alma mater de los veracruzanos que empiezan a sentir la escasez de los recursos, que no aceptan la mendicidad de lo que a derecho corresponde y que monta en cólera por el cinismo de la autoridades financieras de detener arbitrariamente el pago porque, según la propia Sefiplan, cree que la Universidad tiene adeudos que sólo existen en la ignorancia administrativa de la propia ley.
Ahora, el diálogo sigue pero con las autoridades judiciales que habrán de tipificar los delitos sobre los funcionarios públicos que tengan responsabilidad en la indolencia, arbitrariedad, omisiones, autoritarismo, negligencia y prepotencia al decidir, insisto, unilateralmente el no pago de los subsidios a la Universidad Veracruzana.
Los ministerios público y los jueces, tanto estatales como federales, tendrán que dar curso y tipificar las faltas y emitir un laudo para pagar lo que se le debe a la Universidad veracruzana, seguramente, ante los agravios contra la UV, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, estará trabajando por la posible presunción de actos violatorios de derechos humanos, al considerar que la educación es un derecho que la constitución tutela.
Ojalá que a quien corresponda le caiga el veinte, de que los subsidios son necesarios para que los organismos autónomos puedan funcionar y cumplir con la vocación de ofrecer educación superior a todos los veracruzanos.
La incertidumbre y preocupación empieza a permear el ánimo de miles de alumnos, profesores, investigadores, trabajadores, proveedores, prestadores de servicios y a los familiares de todos los que viven y sobreviven de la Universidad Veracruzana.
La recomposición de la credibilidad de respetos hacia la Universidad Veracruzana, será lenta y muy difícil de recuperar, en fin, esperemos las respuestas oportunas del Poder Judicial y que sea para bien.
Suburbio 1
Estas denuncias de la UV, podrían generar una avalancha si todos los acreedores se inclinan a judicializar los adeudos que el estado tiene con ellos.
[email protected]
Primero fue, en conferencia de prensa, en la cual la Señora Rectora, expresa la postura de la UV ante el no pago del Gobierno a la máxima casa de estudios; manifiesta la institucionalidad de la Universidad Veracruzana, que no la sumisión al poder ejecutivo y dentro de esa institucionalidad, por los cauces legales, requiere el pago a través de denuncias ante la Fiscalía del Estado y la PGR, para que, el gobierno de Veracruz, cumpla con el pago de los subsidios obligados para el funcionamiento de la UV.
Luego en una carta firmada, por Flavino Ríos Alvarado, sus asesores o él mismo pretende cubrir la verdad con una errónea cortina de humo donde, hasta con datos equivocados, pretende cobrar adeudos por falta de pago a pensionados y cargas fiscales de las cuales la Universidad está exenta.
De la misma forma el abogado general de la UV, vuelve a explicar detalladamente las inconsistencias de la misiva del Secretario de Gobierno, que pretendió con esa carta seguir justificando la ineficiencia e incumplimiento de los compromisos pactados con su jefe, el gobernador del estado, y el compromiso contraído por la Secretaría de Finanzas que había instrumentado un calendario para los pagos que nunca llegó.
En ambos casos, el Secretario de Gobierno, pensó que con esos acuerdos publicados y referenciados con los links respectivos en la contestación del Abogado general de la UV, sería suficiente para dar largas y entretener a la sociedad y a la misma Universidad Veracruzana, de que el pago ya estaba procesándose ¿para cuándo? quién sabe, sólo era un distractor para dilatar los compromisos.
Lo que nunca pensaron los representantes del Gobierno es que, la premura y urgencia de la UV por saldar pasivos con proveedores, prestadores de servicios y los propios gastos para pago de nómina y operación de la UV, obligó a las autoridades universitarias a la última opción para requerir el pago por la vía legal un par de denuncias para ver si ahora el estado si paga.
El diálogo tan presumido por el Gobierno, el cual ofrece la firma de una minuta sólo para ganar tiempo y echarse adentro de los impenetrables “pilares de oro y plata” para aplicar las leyes del cansancio, aburrimiento en contra de los acreedores.
Pero en esta ocasión el acreedor, es la Universidad Veracruzana, el alma mater de los veracruzanos que empiezan a sentir la escasez de los recursos, que no aceptan la mendicidad de lo que a derecho corresponde y que monta en cólera por el cinismo de la autoridades financieras de detener arbitrariamente el pago porque, según la propia Sefiplan, cree que la Universidad tiene adeudos que sólo existen en la ignorancia administrativa de la propia ley.
Ahora, el diálogo sigue pero con las autoridades judiciales que habrán de tipificar los delitos sobre los funcionarios públicos que tengan responsabilidad en la indolencia, arbitrariedad, omisiones, autoritarismo, negligencia y prepotencia al decidir, insisto, unilateralmente el no pago de los subsidios a la Universidad Veracruzana.
Los ministerios público y los jueces, tanto estatales como federales, tendrán que dar curso y tipificar las faltas y emitir un laudo para pagar lo que se le debe a la Universidad veracruzana, seguramente, ante los agravios contra la UV, la Comisión Estatal de los Derechos Humanos, estará trabajando por la posible presunción de actos violatorios de derechos humanos, al considerar que la educación es un derecho que la constitución tutela.
Ojalá que a quien corresponda le caiga el veinte, de que los subsidios son necesarios para que los organismos autónomos puedan funcionar y cumplir con la vocación de ofrecer educación superior a todos los veracruzanos.
La incertidumbre y preocupación empieza a permear el ánimo de miles de alumnos, profesores, investigadores, trabajadores, proveedores, prestadores de servicios y a los familiares de todos los que viven y sobreviven de la Universidad Veracruzana.
La recomposición de la credibilidad de respetos hacia la Universidad Veracruzana, será lenta y muy difícil de recuperar, en fin, esperemos las respuestas oportunas del Poder Judicial y que sea para bien.
Suburbio 1
Estas denuncias de la UV, podrían generar una avalancha si todos los acreedores se inclinan a judicializar los adeudos que el estado tiene con ellos.
[email protected]